Quien no hace obras de misericordia, no está en la gracia, y si no se está en la gracia, no seguimos el Evangelio.
Quien no hace obras de misericordia, no está en la gracia, y si no se está en la gracia, no seguimos el Evangelio.
hay muchos que dicen ser cristianos y se hacen llamar cristianos pero es con sus obras lo niegan, sí ahogas elEvangelio, con preceptos de hombres, estas negando el mensaje de Jesucristo entonces no puedes decir qué estás en la gracia.
Sigo esperando una respuesta lógica de esos falsos cristianos a ver si alguno me convence
Hola Esperanza, Estos cristianos confundidos, con su supuesta ley de "la gracia" anulan el verdadero significado de la Gracia, que es la misericordia, esto es, hacen ignorar los misericordiosos mandamientos que Jesucristo nos enseña en el Evangelio y que son la única y verdadera Ley de Dios.
El Evangelio que predicó Jesucristo:
Hola amigos... El Evangelio dice así:
"Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado". (Marcos 16:15-16).
"Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén". (Mateo 28,19-20).
"Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin". (Mateo 24,11-14). __________________
Hola amigos Roost y Esperanza..
Jesucristo es Dios que se hizo hombre..., y en Él radica toda la plenitud de la divinidad... y Jesucristo en su misericordia volvió a enseñar al mundo los verdaderos mandamientos de Dios que había recibido el pueblo en tiempos de Moisés...
Los escribas judíos despues de Moisés, habían cambiado la ley en mentira como nos dicen los profetas Jeremías, Isaias, y otros profetas... Entonces Dios se hizo hombre y volvió a enseñar al mundo los verdaderos mandamientos de Dios que así nos dicen:
"todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque ésta es la ley y los profetas". (Mateo 7:12)
Jesús también enseña los verdaderos mandamientos de la Ley de Dios que debemos guardar para entrar en la vida y que así nos dicen:
"Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones. Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos. Otra vez os digo, que es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios" (Mateo 19:16-24)
A los hombres codiciosos que se hacen dueños de muchas posesiones les cuesta muchísimo entregar sus bienes a los pobres. Ellos no quieren el camino de la misericordia y prefieren imponer sacrificios y esclavitud a los pobres. Por eso, Jesucristo también les dijo:
"... si supieseis qué significa: Misericordia quiero, y no sacrificio, no condenaríais a los inocentes" (Mateo 12:7 )
"Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo". (Mateo 22:34-40)
El Señor no mandó que se mate a las personas que cometen faltas, sino que se les perdone, pues el Evangelio así nos dice:
"Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete? Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete". (Mateo18:21-22)
"Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas". (Mateo 6:14)
La fe viene por escuchar o leer o conocer lo que enseña el Evangelio. Así que no es primero la fe, sino conocer el Evangelio, porque si no conoces el Evangelio, ¿cuál es tu fe?... Así que lo primero es conocer los misericordiosos mandamientos del Evangelio, y luego la fe ya viene cuando comprendes que los mandamientos del Evangelio son misericordiosos y necesarios para la vida.
Si tú dices a alguien: "ten fe", él obligadamente te dirá: ¿fe en qué?... No hay fe donde no está la Palabra, por eso Jesucristo mandó a sus apóstoles y discípulos que predicaran el Evangelio por todos los pueblos. Y aquel que crea será salvo, y los que no crean serán condenados.
Hay que creer que los mandamientos que enseña Jesucristo en el Evangelio son los mandamientos de Dios, y eso es lo principal que debes creer. Y si no crees eso, ¿cual es tu fe?, ¿dónde está tu fe?...
Los hombres pueden creer muchas cosas y pueden tener fe en muchas cosas, pero los que tienen fe en Jesucristo es porque conocieron el Evangelio y creyeron en sus misericordiosos mandamientos.
No hay Evangelio sin los mandamientos de Jesucristo. Igualmente te digo que no hay fe verdadera si no conoces y no guardas los mandamientos que te enseña Jesucristo en el Evangelio.
¿Y qué fe vas a tener en Jesucristo si no conoces lo que Jesucristo manda?... Lo primero es conocer el Evangelio para conocer sus misericordiosos mandamientos, y luego, cuando comprendes que los misericordiosos mandamientos del Evangelio son los verdaderos mandamientos de Dios, es cuando ya empiezas a tener fe.El Evangelio no es lo que os va a salvar: es la Gracia por medio de la fe.
Aquellos que no recibieron con amor los mandamientos del Evangelio, no quisieron conocer el Evangelio. Entonces, ¿dónde está la fe de estos seres?...
Lo primero de todo es amar los misericordiosos mandamientos de Jesucristo.
Lo primero es conocer los mandamientos de Jesucristo y amarlos, porque si no los amas, entonces tu fe es una fe muerta, pues así te dice Jesucristo:Teniendo la Gracia por medio de la fe, entonces ahí si, muy bien, el Evangelio, y guardar los Mandamientos.
"Si me amáis, guardad mis mandamientos. Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre: el Espíritu de verdad...". (Juan 14:15-16)
Como ves, lo primero es conocer los mandamientos de Jesucristo (los mandamientos del Evangelio). Y si los amas, entonces los guardarás por el amor que los tienes. Y si los guardamos con amor, entonces, por el amor de Jesucristo, recibiremos el Espíritu de Verdad que nos hace conocer cuál es la verdadera Gracia de Dios para que permanezcamos en ella.
La Gracia es la misericordia que nos enseña los misericordiosos mandamientos de Jesucristo. Y los que no aman los misericordiosos mandamientos de Jesucristo, ¿qué gracia pueden tener?:
"Y como queréis que hagan los hombres con vosotros, así también haced vosotros con ellos. Porque si amáis a los que os aman, ¿qué gracia tenéis? Porque también los pecadores aman a los que los aman. Y si hacéis bien a los que os hacen bien, ¿qué gracia tenéis? Porque también los pecadores hacen lo mismo. Y si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué gracia tenéis? Porque también los pecadores prestan a los pecadores, para recibir otro tanto. Amad, pues, a vuestros enemigos, y haced bien, y prestad, no esperando de ello nada; y será vuestro galardón grande, y seréis hijos del Altísimo; porque él es benigno para con los ingratos y malos. Sed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso". (Lucas 6:31-36)
Como ves, la misericordia es lo más grande, porque la misericordia es lo que Dios quiere, y la misericordia es la Gracia de Dios. Por eso, Jesucristo también te dice:
"... si supieseis qué significa: Misericordia quiero, y no sacrificio, no condenaríais a los inocentes" (Mateo 12:7 )
Como ves, aquellos que se hacen llamar "católicos" o "evangélicos" o de cualquier otra religión que no son misericordiosos y que no aman la misericordia, es que no aman la verdadera Gracia de Dios.
Estar en la Gracia se demuestra siendo misericordioso y guardando los misericordiosos mandamientos de Jesucristo.