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Porque25
Jesucristo es Dios, y Él no vino a entregarse a ninguna religión de hombres porque Él y su Palabra eran la religión, LA ÚNICA RELIGIÓN VERDADERA.
Y Jesucristo no vino a seguir las leyes judías del viejo testamento que estaban cargadas de preceptos de hombres. Jesucristo vino a abolir todo lo que eran preceptos de hombres en las leyes del viejo testamento, y volvió a enseñar al mundo los verdaderos mandamientos que Dios había entregado al pueblo en tiempos de Moisés.
Jesucristo no vino a entregarse a ninguna religión. Él era la religión, porque Él era Dios.
Los judíos o judaizantes que quieran conocer los verdaderos mandamientos d Dios, deben examinar el Evangelio porque el Evangelio es el que nos vino a traer la verdadera Ley y los verdaderos mandamientos de Dios.
¿Y por qué Jesucristo dio su vida para volver a enseñarnos los verdaderos mandamientos de Dios?... Eso lo enseñan los profetas, pues los profetas, antes de Jesucristo, avisaron al pueblo de que los escribas judíos habían cambiado la Ley de Dios en mentira. Los profetas así nos dicen:
"...mi pueblo no conoce el juicio de Yavé. ¿Cómo decís: Nosotros somos sabios, y la ley de Yavé está con nosotros? Ciertamente la ha cambiado en mentira la pluma mentirosa de los escribas" (Jeremías 8:7-9).
"Y la tierra se contaminó bajo sus moradores; porque traspasaron las leyes, cambiaron los mandamientos, quebrantaron el pacto sempiterno" (Isaías 24:5-6)
"Ay de los que dan leyes inicuas y de los escribas que escriben prescripciones tiránicas para apartar del tribunal a los pobres y conculcar el derecho de los desvalidos de mi pueblo, para despojar a las viudas y robar a los huérfanos" (Isaías 10,1-2)
"Así ha dicho Yavé el Señor: Esta es Jerusalén; la puse en medio de las naciones y de las tierras alrededor de ella. Y ella cambió mis decretos y mis ordenanzas en impiedad más que las naciones, y más que las tierras que están alrededor de ella; porque desecharon mis decretos y mis mandamientos, y no anduvieron en ellos". (Ezequiel 5:5-6)
Y Jesucristo, recordando las palabras del profeta Isaías, también les dijo a los escribas y fariseos:
"Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, cuando dijo:
Este pueblo de labios me honra;
Mas su corazón está lejos de mí.
Pues en vano me honran,
Enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres". (Mateo 15,7-9
Como ves, los profetas nos dicen que los escribas judíos habían cambiado la Ley de Dios en mentira. Y allí donde Dios decía "NO MATARÁS", ellos escribían leyes de penas de muerte y de genocidios que Dios no había mandado. Jesucristo abolió las leyes de muerte y volvió a enseñarnos la Ley de vida que Dios había dado a los hombres desde el principio.