¡Ostras, es cierto! Tengo que pasarme la podadora y en cuanto esté listo...Nadal se queda en pañales ante mi torneado muslamen. Voy a ver qué tengo por ahí que no desmerezca mi fama de nalgón.
Ya te estoy imaginando, chiquillo!!!
Me ofrezco a depilarte, sirve que veo todo de cerca, prometo portarme seria y no hablar ni hacer muecas.