Que me acaban de decir: Si tu me dejas y me das permiso, podemos tener hasta trillizos.
Y ya la encontré jajaja qué inspirado! Jajajajaja
No me parece.....
“El alma humana es una caja de donde siempre puede saltar un payaso haciéndonos mofas y sacándonos la lengua, pero hay ocasiones en que ese mismo payaso se limita a mirarnos por encima del borde de la caja, y si ve que, por accidente, estamos procediendo según lo que es justo y honesto, asiente aprobadoramente con la cabeza y desaparece pensando que todavía no somos un caso perdido.”
- José Saramago, El Doble
tengo ganas de ......... algo nuevo...
tengo ganas de escuchar a chalino
Y me dejaste en eso, me sacaste del proceso, me diste una trompada con tu brazo secular, y me dejaste llorando, con los mocos por el fango mientras te pedía otra oportunidad, soy un hombre que sufre...
Confieso que, no sé cómo, no me explico, no entiendo, no es coherente, no es posible... que lea a los mejores, a mis escritores del alma, y que de pronto sea un poco vulgar.
Tal vez ese "de pronto" sea parte de mi lado oscuro.![]()
Última edición por Estrella_fugaz; 02-dic.-2014 a las 17:05
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Que no sea tu cuerpo la primera tumba de tu esqueleto.
El "lado oscuro" es un animal que vive dentro de nosotros. Un animal con grandes ventajas porque te permite hacer grandes cosas, pero al mismo tiempo te obliga a darle de comer cada cierto tiempo.
Esta en tí vivir con él y alimentarlo en las noches de luna llena, dando rienda suelta a sus instintos primarios, o matarlo y ser para siempre una persona gris, del montón, como las demás.
En mi caso, he aprendido a aceptar a mi animal. No me respeta, pero sabe que puedo negarle sus deseos y así convivimos juntos. Me permite usar su poder para alcanzar todas mis metas personales y profesionales, pero a cambio, algunas noches, dejo que tome control y que devore a alguna que otra doncella inesperada.
Que pequé al mediodía![]()
Que esto de trabajar muchísisisisisisisisimo me está gustando... aunque apenas es miércoles y me siento bastante agotado.
Mi pena es sencilla y nada misteriosa y, como tu alegría, por cualquier cosa estalla.