El primer versículo de la Biblia siempre ha sido mi favorito, o mas bien, el que resume mi comprensión de la vida en Dios. En una sociedad donde el modernismo cuyo pensamiento filosófico no ha conseguido satisfacer las necesidades fundamentales del ser humano, se ha abierto paso al postmodernismo y ahora estamos ya en plena edad tecnológica. Esto esta ocasionando profundos cambios en la forma de entender la vida por parte de nuestros contemporáneos, y digo esto, porque creo que los Cristianos, tenemos y debemos de ofrecer una alternativa al pensamiento contemporáneo, a fin de cuentas el Evangelio es en si mismo una forma de vida, con una cosmovisión propia que parte siempre de Dios.

Los Cristianos nos vemos en ocasiones realmente desorientados ante la dificultad de intentar ser luz en medio de un mundo que no cree absolutamente en nada, ya que todo es relativo. Por eso me aferro a la verdad Bíblica, dando gloria a Dios por su creación.

Desde una perspectiva Bíblica, reconocer que Dios es Señor y creador, nos lleva a comprender la realidad misma del ser humano, por cuanto si es Señor y Creador, conserva de alguna manera los derechos de autor, ¿verdad?

En mi comprensión del Evangelio, entiendo que es siempre Dios el que da el primer paso, ya lo vemos desde el primer versículo del Génesis:

“En el principio creó Dios los cielos y la tierra.”

Como decía, en un mundo donde Dios a pasado a quedar relegado a poco menos de un mito, ¿Cómo trasmitir la realidad de la existencia de un Dios preocupado por el ser humano?, mas aun cuando son tantas las catástrofes naturales y las injusticias que cometen los estados unos contra otros.

Cuando lanzo esta pregunta a mis amigos, algunos son sinceros y me dicen:

“No sabemos bien, como puede llegar el mensaje del evangelio a nuestros semejantes, pero nuestro deber, es dar testimonio, y no tan solo testimonio verbal, si no mas bien testimonio de vida.”

Otros sin embargo, llenos de ese estúpido triunfalismo pseudo cristiano, dicen:

“Dios lo puede todo.”

No es que yo no lo crea, claro que Dios lo puede todo, pero pienso que tenemos una responsabilidad como individuos, no podemos conformarnos solamente con hablar; creo sinceramente que toda idea o pensamiento que no se trasforma en acción, no sirve de nada, y en Dios tenemos ejemplo, ¿Acaso no fue Él, el que creo los cielos y la tierra en el principio?