Carros de fuego.
La primera vez que la vi, estaba todavía en el colegio y el otro día quise volver a verla.
Carros de fuego.
La primera vez que la vi, estaba todavía en el colegio y el otro día quise volver a verla.
La música se toca con el corazón y se siente con el alma.
Quien ama la música, ama la vida.
Sin música, la vida sería un error.
La vida es como el teclado de un piano; tiene teclas blancas, pero también algunas negras.