Conclusión:

Ciertamente con Adán entró la muerte para la humanidad, pero Dios en su bondad y siempre teniendo misericordia de su creación, tiene una esperanza de vida para el hombre y .... "de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquél que en Él cree no se pierda, más tenga vida eterna" (Juan 3:16)

Si por Adán el hombre conoció la muerte, es por Jesucristo que el hombre conoce la vida eterna. Es Nuestro Señor Jesucristo el Plan de Salvación para la humanidad, recibirlo en tu vida, creer que Él es el Hijo de Dios y seguirlo, es la mejor decisión que el ser humano puede tomar.

El camino para la reconciliación con Dios está abierto, la salvación es dada por Gracia para todos, Dios no hace acepción de personas, Cristo murió para perdón de los pecados, y presentó su sangre ante el Padre para justificar a los pecadores, para redimir al hombre y pertenecer a una nueva creación, una nueva generación de hombres y mujeres agradecidos con Dios por enviarnos a Nuestro Abogado, a Nuestro Intercesor, a Nuestro Señor y Salvador para llegar ante el Padre y formar parte de su familia.

En esta vida seguiremos viendo el dolor, la maldad, los problemas, pero podemos poner nuestra carga en Jesucristo y Él nos hará descansar. Es Él quien restaura al quebrantado, levanta al caído, consuela al herido y sana al enfermo. Es Cristo quien te fortalece en la debilidad y nunca te deja solo.

Juan 16:33
Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción, pero confiad, yo he vencido al mundo.

Confía en Jesucristo, da ese paso de fe necesario para transformar tu vida, cree y vive.
Bendiciones.