¿Pero que malos ni que malos? Si lo decimos con todo el cariño del mundo jamia.
Y si no observa, ojo al dato.
Suegra, ¿usted cree en la reencarnación?
Pues claro que sí.
Y dígame, si usted se muere, ¿en qué animal le gustaría reencarnarse?
Pues a mi siempre me han gustado las víboras.
No vale repetir, no vale repetir.
Que cariño y amor se desprenden de esas palabras.
Maganna la emoción me embarga