Y es una pena que así sea porque como bien dices, podemos enriquecernos entre todos, pero no a costa de batallar siempre con el que parece tener siempre una verdad absoluta e intocable.
Ya no digo que siembre la felicidad por dónde pase, pero no es necesario tanto despliegue ni artimaña para menospreciar a los que difieren en sus puntos de vista. Ya no digo que vengan con empatía o tolerancia a 100%, pero con tan sólo un mínimo de educación, ya se consigue el respeto necesario para poder aportar e intercambiar conocimientos y sin cabrear a cientos, la madre, la Gestapo...