Tú no enseñas el Evangelio, enseñas una doctrina basada en mandamientos y preceptos de hombres, pero ni el Evangelio ni sus misericordiosos mandamientos.
Tú no enseñas el Evangelio, enseñas una doctrina basada en mandamientos y preceptos de hombres, pero ni el Evangelio ni sus misericordiosos mandamientos.