Kimo, tú te acuerdas de tu Dios testigo de Jehová, pero no te acuerdas que Jesucristo es Dios que se hizo hombre, y vino a enseñar al mundo los verdaderos mandamientos de Dios, que son necesarios para entrar en la vida.
Kimo, tú te acuerdas de tu Dios testigo de Jehová, pero no te acuerdas que Jesucristo es Dios que se hizo hombre, y vino a enseñar al mundo los verdaderos mandamientos de Dios, que son necesarios para entrar en la vida.