No existe ninguna regla vital exacta, tan solo las matemáticas son exactas, el azar es imprevisible. Esto de mal de muchos consuelo de tontos es un refrán para los segundos.
Si siembras patatas no te aseguras recoger patatas, las cosechas se pueden perder, hablando en plata, son muchas las circunstancias de las que dependen.
Y precisamente Pablo y la ética están discutidos, porque a la criaturita le pillaba todo, se vendía al mejor postor.