La palabra de Jesucristo, que es Dios, no es variante, pues fue dada para siempre, y manda misericordia. Dios es siempre el mismo y no cambia, es misericordioso y mandó la misericordia para siempre.
Son los hombres los que cambiaron y cambian la Palabra de Dios. Por eso encuentras tantas contradicciones en las biblias.
Pero la verdadera Palabra de Dios es siempre la misma, que manda a los hombres que tengan misericordia con todos.