Cita Iniciado por Estocada Ver Mensaje
La sangre no es una persona pero Jesús dijo que el Espíritu Santo sí lo es al llamarlo nuestro Consolador, algo que solo una persona puede ser.

Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre: el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros.” (Juan 14:16-17)

“Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.” (Juan 14:26)

“Pero cuando venga el Consolador, a quien yo os enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, él dará testimonio acerca de mí.” (Juan 15:26)

“Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré. Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.” (Juan 16:7-8)

*“Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir. El me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber. Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.” (Juan 16:13-15)

Es evidente que para el Señor Jesús el Espíritu Santo era Alguien, no algo. Una persona, no una fuerza impersonal.
Estocada

En el post #790
te respondi a los textos y argumentos plantados por ti

Consolador puede ser una persona
pero no exclusivamente.

La musica nos consuela
y hay muchas otras cosas que nos pueden consolar.
asi que no prueba que el espiritu que le pertenece a Jehova
sea la tercera persona Dios.

No es extraño que en las Escrituras se personifique algo
que en realidad no es una persona.

En el libro de Proverbios (1:20-33; 8:1-36)
se personifica a la sabiduría, y en el hebreo original,
así como en las traducciones españolas, se le da el género femenino.

La sabiduría también está personificada en Mateo 11:19
y Lucas 7:35 y se dice que tiene “obras” e “hijos”.


Cuando el apóstol Pablo habla del pecado, la muerte y
la bondad inmerecida, los personifica como “reyes”.

(Ro 5:14, 17, 21; 6:12.)

Dijo que el pecado ‘recibía incentivo’,
‘obraba codicia’, ‘seducía’ y ‘mataba’. (Ro 7:8-11.)


Sin embargo, es obvio que Pablo no quería decir que
el pecado fuese en realidad una persona.


Como Dios mismo es un Espíritu y es santo, y como todos
sus hijos angélicos fieles son espíritus y son santos, es lógico que
si el “espíritu santo” fuese una persona, de algún modo
las Escrituras permitirían identificar y distinguir
a tal persona espíritu de todos los demás ‘espíritus santos’.
Se esperaría que, al menos, el artículo definido se usase
con esta expresión en todos los casos donde
no se le llamase “espíritu santo de Dios”
o no estuviese modificado por alguna expresión similar.

Por lo menos esto lo distinguiría como EL Espíritu Santo.
Pero, por el contrario, en muchos casos la expresión “espíritu santo”
aparece en el griego original sin el artículo, lo
que indica que no se trata de una persona.
(Hch 6:3, 5; 7:55; 8:15, 17,19; 9:17; 11:24; 13:9,52;
19:2; Ro 9:1; 14:17; 15:13, 16,19; 1Co 12:3;
Heb 2:4; 6:4; 2Pe 1:21; Jud 20,
Int y otras traducciones interlineales.)