Te lo explico:
Que el matrimonio sea honorable entre todos (Jesucristo es el esposo y la iglesia es la esposa), y el lecho conyugal (la iglesia) sea sin contaminación, porque Dios juzgará a los fornicadores y a los adúlteros (Dios juzgará a los que se entreguen a prostitutas o falsas religiones..., y a los que miren a las mujeres para codiciarlas) pues Jesucristo así te dice:
"Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón". (Mateo 5, 27-30)
La codicia es la raíz de todos los males, Y los que miran a las mujeres para codiciarlas (para tenerlas de su propiedad y amenazadas de muerte), adulteran en su corazón... "cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón"...
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Las personas de buena voluntad no necesitan demostrar la existencia de Dios, pues Jesucristo viene sobre ellos y les demuestra su existencia en manifestaciones espirituales, en visiones sobrenaturales, en visiones en sueños Y en las misericordiosas enseñanzas del Evangelio...
Los creyentes ateos dicen que Dios no existe, pues muy bien, que lo demuestren... Y como no lo pueden demostrar, entonces vana es su predicación y vana es su creencia...
Si Jesucristo no se nos hubiera manifestado no tendría sentido esta discusión...
¿Y por que son las cosas así?... Todo es cuestión de amor, pues Jesucristo así dijo:
"El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él".......
"Le dijo Judas (no el Iscariote): Señor, ¿cómo es que te manifestarás a nosotros, y no al mundo? Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él. El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió". (Juan 14:21-24)
"Si guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor. Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido. Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado.
Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos. Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer". (Juan 15:10-15)