Iniciado por
EsquizOfelia
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HOTEL MAMÁ.
Cuando lo leí no podía creer: El 25% de los brasileros entre 25 y 34 años, vive con los padres!!! El 60% son hombres.
Ergo: casi 30 millones de tremendos pelotudos, viven bajo las órdenes (y protección) de las mamitas. Ropita planchada, les ponen el termómetro, ¿les soplan la sopita caliente?
¿Cómo será el diario vivir de esos hombres? ¿Usarán la máquina de afeitar del papi? ¿Seguirán siendo obligados a limpiar el pichí fuera del “tarro”, o la tabla nunca levantada como cuando eran niños? ¿Seguirán coleccionando figuritas? ¿Tendrán que llevar la noviecita para la escalera de servicio para toquetearse un ratito, o los padres le permitirán dormir con ella en el cuarto, desde que no hagan mucho ruido?
No soy psicóloga, pero imagino que cuanto más tiempo dura esa relación, la persona postergará irremediablemente su madurez, ya que continuará viviendo una simbólica minoridad.
Estos señores no saben lo libertador que es despertarse en su propio departamento. Salir al corredor y recoger el diario, mientras prepara el desayuno para la bella dama que pasó la noche con él. O tomar baño con la puerta abierta. Tender la cama, llevar la ropa a la lavandería, desparramarse en el sofá de la sala para ver el fútbol, quedarse dormido y despertar al día siguiente con todas las luces de la casa encendidas (sin que mami les reclame el gasto).
Hay otro riesgo importantísimo para el que decide vivir con su madre divorciada: Joderle la vida.
Imagine esa cincuentona libre, crin al viento, todavía capaz de dar y sentir escalofríos, con algún pretendiente buen mozo y posiblemente buen amante…tener al “nene” en casa como monaguillo…Debe ser la ostia!
Un consejo: Colabora con ella Edipito.
Se sacudió al pesado de tu padre, tiene independencia económica, hormonas hormigueantes…Cuando te sugiera que mañana pases TODA LA TARDE en el shopping…No discutas y arranca.
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