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Iniciado por beltroni
subalterno, na. (Del lat. subalternus). adj. inferior (ǁ que está debajo de algo). || 2. Dicho de una persona: inferior (ǁ subordinada)
Efectivamente, a eso me refería. Si no te contenta la primera acepción (por eso de ser alguien, no algo, pues coge la segunda, que ya aclara que es dicho de una persona, o sea, tú……. Otra cosa es que tu perro no sea una persona, pero sí que es inferior a ti)
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esa imagen lo único que hace es demostrar lo que digo, es, como se dice? "empalagoso"?, jaja, mentira, la verdad como ya dije antes no me caen mal los gatos de hecho también me agradan pero, la realidad es que lo que digo es cierto.
Empalagoso no, pesao. Pero…… por lo menos no huele mal como los perros, jeje, y no me mancha los pantalones con sus pezuñas como sí hacen los perros que tienen mis hermanos….. que también son pesaos… y pesan muchos más kilos que mis gatos. Bueno… son menudencias…. Los pobrecillos (ambos, perros y gatos) muestran así su cariño con los que tienen confianza.
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claro que si e tenido gatos por eso los conozco, se de lo que hablo, yo menciono puntos a favor y en contra de los gatos.
Pero tienen que ser gatos caseros, urbanos…. No valen gatos que vienen a por su comida y luego se largan a seguir viviendo su vida al margen. Esos son muy diferentes de los gatos caseros.
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- Los perros vienen cuando los llamamos. Los gatos reciben el mensaje y, aunque algunos terminan acudiendo, normalmente se acercan cuando les apetece a ellos.
Cierto. También es cierto que no todos los perros acuden cuando se les llama, haciendo lo mismo que los gatos. Reciben el mensaje, miran y……. cuando les apetezca vienen. Perros que van a su bola abundan mucho….. claro que los gatos van más a su bola…
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- Los perros pueden ser bañados cada cierto tiempo, los gatos se bañan ellos mismos.
- Si hay alguna urgencia en tu casa, por ejemplo un incendio, los perros ladrarán. Los gatos, directamente intentarán salir por alguna de las puertas o ventanas.
- Los perros te pueden traer las zapatillas o el periódico, los gatos te podrán traer alguna de sus “piezas”: pequeños ratoncillos, lagartijas, etc.
Jejeje. Una vez me pusieron un saltamontes en la mesa y luego me llamaba para que viniese a ver su “regalito”. No le podía regañar porque el tío estaba muy orgulloso de su regalo. Así fue domesticado hace miles de años en el antiguo Egipto, para que cazase ratones y bichejos… y ese suele ser el único trabajo productivo que hace el gato para el ser humano (al margen de ser una mera mascota acompañadora, que con eso me basta a mí)
Cita:
- Los gatos suelen dormir grandes siestas y si les despiertas para jugar, puede que no estén de mucho humor. Los perros suelen estar activos a cualquier hora. Aunque estén durmiendo la siesta, si le levantas para jugar con la pelota lo hará con mucho gusto.
Bueno…. eso es muy personal. Depende del perro y del gato. El que tengo ahora, que es pequeñajo, es hiperactivo. Aunque esté dormido, como le tire una pelota de papel (un papel arrugado), se arranca como un morlaco hacia el papel.
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- Con un cinturón especial para coches, los perros pueden viajar en la parte trasera de tu coche. Los gatos deben viajar en el interior de una caja especial para ellos.
- Cuando vuelvas a casa, tu perro se lanzará sobre ti y moverá el rabito de manera constante mostrándote su alegría. Los gatos, si salen a recibirte, te mirarán y simplemente te observarán.
Más o menos…. Son más expresivos los perros y más pesados en ese sentido. Ya he comentado que los perros que tienen mis hermanos siempre me manchaban los pantalones con sus patas (y más si había llovido. Tenía que levantar mi rodilla para que no se me acercasen). Mis gatos (el que tengo ahora y los que he tenido) suelen venir a la puerta. Todos miran, unos dan un saludo con un maullido, otros me siguen a pasarse por mis pies (sin manchar…, no como otros… ). Un par de carantoñas y ya está. ¿Para qué más?
Cita:
- Cuando les regañes, los perros bajarán la cabeza y esconderán el rabo. Los gatos no suelen inmutarse. Podrán mirarte fijamente e incluso bostezar.
Aquí no tiene razón. Un gato sabe muy bien cuando hace mal. Suelen salir corriendo cuando se les dice su nombre y la palabra NO. Vaya que lo saben. Saben distinguir una bronca de unas palabras amables. No son tan tontos.
Al final… todo se reduce a gustos y cada persona tiene sus razones de peso (de mucho peso) para preferir gatos a perros o viceversa o todos o ninguno.