Cuando alguien cercano a ti tiene una "discapacidad" "capacidad menor" o cuanto eufemismo se invente la sociedad, tienes que entender que son personas, no personas diferentes. Antes de mi encuentro con ella, la familia le trataba como la "pobrecita" como la "niña a la que hay que cuidar". al mismo tiempo que hay que someter porque no es dueña de sí misma. No depende de mi, yo ni por enterado estaba, más allá de que había sido mi alumna, en un periodo en que jamás pensaría algo con ella, era adolescente, sólo tenía por ella un afecto de persona, de alguien que conoces y que te procura, por lo que eres atento con ella.

Más adelante les narraré de donde viene mi capacidad por tratar a todo tipo de personas, sin observar su condición, dándoles su lugar como personas sin importar lo que les haya pasado. Por lo pronto un relato previo antes de nuestro re encuentro aquél septiembre de 2015.

Krishan Nadesh

En mayo del 2015, comencé a tener una crisis, recuerdo que una noche yo me desperté a las 12 de la noche y me levante de la cama, llevaba puesto un pantalón de mezclilla, una playera y sandalias, una voz me decía salte por la ventana, entonces abrí la ventana que está cerca en la sala, entonces salía por la ventana, la voz me decía caíste como un ángel, la voz me decía acuéstate enfrente de cada automóvil estacionado en el patio entonces yo me acostaba en el suelo y me acostaba enfrente de cada auto, la voz me decía ve al encuentro con Krishan Nadesh, entonces yo camine hacia la calle y salí de la casa acudiendo al encuentro con Krishan Nadesh, pero no había nadie en la calle, y yo seguía caminando con los ojos cerrados, y casi no los abría. Entonces como vi que no estaba Krishan Nadesh cerca del árbol de Pirú

Krishan Nadesh es un joven espiritualista de la religión budista que yo conocí desde el año 1999, desde entonces nuestra amistad a seguido) me fui de regreso a la casa y Griselda, Pedro, y Melchor fueron a mi encuentro entonces yo me hice de mis necesidades en mis calzones y con mi mano derecha tome una muestra de excremento y me la introduje en cada oído y otra parte de la muestra me la trague, sabia y olía muy feo y fétido. (aquella voz me decía que me introdujera en los oídos aquella caca y que probara la caca).
Al otro día tanto insistía mi conocimiento en Krishan Nadesh que llegue a pensar en que mejor estaría bien en que llegara hasta la puerta de su casa, entonces me salí de la casa y me fui a la avenida que está cerca de la casa de mis padres, tomé un taxi y el taxi me dejo en la casa de los padres de Krishan Nadesh así que toqué la puerta, el papa de Krishan Nadesh abrió la puerta le pregunte por su hijo, él me dijo que no se encontraba, entonces el señor pago el taxi y me invito a pasar al comedor, me senté en una de las sillas y conversamos, le dije que Krishan Nadesh me había dicho que viniera a visitarlo, él señor le llamo a su hijo y éste le dijo que no me había dicho que viniera a visitarlo, el señor se despidió de mí y me dio como $270.00 pesos mexicanos para poder pagar el taxi y regresar a la casa, recuerdo que esa ocasión llevaba una mochila rosa en los hombros y llevaba dentro una muñeca de porcelana que según yo era mi hija Shantal, esa muñeca es la muñeca que me envió mi madrina Carmen

Me tomaron de los brazos y me llevaron a la casa, ya no recuerdo si me limpiaron o sí me fui a dormir, o si me fui a bañar, lo que si se es que me estuvieron cuidando en las noches para que no me saliera de mi dormitorio, mi mente comenzó a girar y comenzaba a pensar dormida en que el diablo quería mi alma, entonces mi hermana Lisa contacto a un doctor y me llevaron con ese doctor, recuerdo que había estacionado mi hermano Pedro unas cuadras antes del consultorio el auto, así que caminando Griselda y yo sobre una banqueta, una voz me decía tírate al piso, entonces me hinque en el piso y me volvía a levantar para continuar caminando, llegando con ese doctor, pude ver que mi pensamiento me decía que era el diablo mayor, entonces yo me la creí y el doctor me dijo como te llamas, entonces le respondí diciéndole mi nombre, esa vez me receto unas inyecciones, y ya regresando a casa esperamos a que anocheciera para que me aplicara la inyección una vecina que es enfermera.

Cuando fuimos mi hermana Griselda, mi madre y yo a que me inyectara, pude ver unos ojos de diablo que tenía la enfermera, así veía a las personas como con ojos de diablo y eso porque no tenía mis lentes puestos. Recuerdo que en otra ocasión volvimos a ir a la consulta y en esta ocasión mi tía Clara, mi mamá y Griselda me acompañaban y ya en la consulta volví a escuchar una voz que me decía aquí en la sala de espera matate como si estuvieras con Romeo, entonces yo en la sala de espera me acosté con mi Romeo imaginario y nos habíamos dado un espadazo cada uno en el corazón, ya una vez que me llamaron al consultorio yo me senté en el sillón de piel de color blanco y mis familiares también, entonces la voz me decía saluda al diablo que es el diablo mayor, entonces lo salude y les dijo a mis familiares si habían visto una mejoría en mí, entonces ellas le dijeron que no, entonces el medico me recetó unos medicamentos, pero ya no me volvieron a llevar con ese doctor.