Es importante que todos lleguen a comprender la razón de Jesús haber venido en carne, como he estado diciendo antes. Juan el Bautista dijo sobre él:
Juan 1:19 (...) “¡Mira, el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo! ... ".
Con esas palabras significó la muerte sacrificatoria de Jesucristo, el ofrecimiento de su carne y sangre como precio de rescate por los pecados de sus seguidores. En el NT son muchos los textos que hablan acerca de este simbolismo o representación de Jesucristo como cordero sacrificatorio. Vean algunos:
1Ped.1:18 Porque ustedes saben que no fue con cosas corruptibles, con plata u oro, con lo que fueron librados de su forma de conducta infructuosa recibida por tradición de sus antepasados. 19 Más bien, fue con sangre preciosa, como la de un cordero sin tacha e inmaculado, sí, la de Cristo.
Rev.5:6 Y vi de pie en medio del trono y de las cuatro criaturas vivientes, y en medio de los ancianos, un cordero como si hubiera sido degollado (...)11 Y vi, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono y de las criaturas vivientes y de los ancianos —y el número de ellos era miríadas de miríadas y millares de millares—, 12 que decían con voz fuerte: “El Cordero que fue degollado es digno de recibir el poder y riquezas y sabiduría y fuerza y honra y gloria y bendición”.
1Cor.5:7 Quiten la levadura vieja, para que sean una masa nueva, según estén libres de fermento. Porque, en realidad, Cristo nuestra pascua ha sido sacrificado.
En textos citados antes hablo sobre el sacrificio de su cuerpo de carne a Dios:
Juan 6:51 Yo soy el pan vivo que bajó del cielo; si alguien come de este pan vivirá para siempre; y, de hecho,
el pan que yo daré es mi carne a favor de la vida del mundo”.
1Cor.11:27 Por consiguiente, cualquiera que coma el pan o beba la copa del Señor indignamente, será culpable
respecto al cuerpo y la sangre del Señor.
Heb.10:5 Por eso, cuando entra en el mundo, él dice: “‘Sacrificio y ofrenda no quisiste, pero me preparaste un cuerpo. 6 No aprobaste holocaustos ni [ofrenda por] el pecado’. 7 Entonces dije yo: ‘¡Mira! He venido (en el rollo del libro está escrito de mí) para hacer tu voluntad, oh Dios’”. 8 Después de primero decir: “No quisiste ni aprobaste sacrificios ni ofrendas ni holocaustos ni [ofrenda por] el pecado” —[sacrificios] que se ofrecen según la Ley— 9 entonces realmente dice: “¡Mira! He venido para hacer tu voluntad”. Elimina lo primero para establecer lo segundo. 10 Por dicha “voluntad”
hemos sido santificados mediante el ofrecimiento del cuerpo de Jesucristo una vez para siempre.
Sería provechoso también ver el asunto desde la siguiente perspectiva: los cristianos ungidos son invitados a comer del pan en la Conmempración de la muerte de Cristo por una razón: es un simbolismo de que el cuerpo de Cristo ha sido entregado en sacrificio para su rescate, y se benefician directamente de ese cuerpo entregado y muerto, así como los sacerdotes podían y tenían que participar en una cena de los sacrificios que se hacían en Israel bajo la ley de Moisés, e idénticamente tenían que comer todos los judíos del cordero sacrificado durante la Pascua del 14 de Nisán:
Luc.22:19 También, tomó un pan, dio gracias, lo partió, y se lo dio a ellos, diciendo: “Esto significa
mi cuerpo que ha de ser dado a favor de ustedes ... "
Juan 6:48 ”Yo soy el pan de la vida. 49 Los antepasados de ustedes comieron el maná en el desierto y sin embargo murieron. 50 Este es el pan que baja del cielo, para que cualquiera pueda comer de él y no morir. 51 Yo soy el pan vivo que bajó del cielo; si alguien come de este pan vivirá para siempre; y, de hecho, el pan que yo daré es mi carne a favor de la vida del mundo”.
52 Por eso, los judíos se pusieron a contender unos con otros, y decían: “¿Cómo puede este hombre darnos a comer su carne?”. 53 Entonces Jesús les dijo: “Muy verdaderamente les digo: A menos que coman la carne del Hijo del hombre y beban su sangre, no tienen vida en ustedes. 54 El que se alimenta de mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día; 55 porque mi carne es verdadero alimento, y mi sangre es verdadera bebida. 56 El que se alimenta de mi carne y bebe mi sangre permanece en unión conmigo, y yo en unión con él. 57 Así como me envió el Padre viviente y yo vivo a causa del Padre, así también el que se alimenta de mí, sí, ese mismo vivirá a causa de mí. 58 Este es el pan que bajó del cielo. No es como cuando sus antepasados comieron y sin embargo murieron. El que se alimenta de este pan vivirá para siempre”.
... por lo que ellos pueden ser considerados "comprados por un precio" ... uno que es muy valioso. El asunto es el siguiente: si alguna cosa es sacrificada a Dios y se toma de vuelta, ha sido realmente esta cosa entregada a Dios? No se anularía el sacrificio del cuerpo de Cristo si él hubiera recibido el mismo cuerpo sacrificado cuando fue resucitado? Cómo podrían estar participando ( "comiendo del pan" ) los cristianos ungidos durante la Conmemoración de su muerte, si Jesús hubiera recibido ese mismo cuerpo de vuelta?
1Cor.6:17 Pero el que se une al Señor es un solo espíritu. 18 Huyan de la fornicación. Todo otro pecado que el hombre cometa está fuera de su cuerpo, pero el que practica la fornicación peca contra su propio cuerpo. 19 ¡Qué! ¿No saben que el cuerpo que ustedes son es [el] templo del espíritu santo que está en ustedes, el cual tienen de Dios? Además, no se pertenecen a sí mismos, 20 porque
fueron comprados por precio. Sin falta, glorifiquen a Dios en el cuerpo que son ustedes.
... 7:22 Porque cualquiera en [el] Señor que haya sido llamado siendo esclavo es liberto del Señor; así mismo, el que haya sido llamado siendo hombre libre es esclavo de Cristo. 23
Ustedes fueron comprados por precio; dejen de hacerse esclavos de los hombres.
2Ped.2:1 Sin embargo, llegó a haber también falsos profetas entre el pueblo, como también habrá falsos maestros entre ustedes. Estos mismísimos introducirán calladamente sectas destructivas y
repudiarán hasta al dueño que los compró, trayendo sobre sí mismos destrucción acelerada.
Esto del precio pagado por los seguidores de Cristo no es pura palabrería barata. En realidad se pagó un precio muy alto: el cuerpo y la sangre de Jesucristo que fueron ofrecidos a Dios como el cuerpo y sangre de un cordero sin tacha, perfecto, y digno de ser ofrecido a Dios en perfección.
Son muchos los pasajes que también hablan del precio ofrecido a Dios para salvación de la humanidad que va a ser redimida. De hecho, sin ese precio pagado, ninguna salvación sería posible. Decir que Jesús recibió de vuelta su cuerpo, es una forma de decir que ese precio se anuló por devolución del pago, lo mismo con referencia a su cuerpo o carne, que a su sangre:
Hech.20:28 Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño, entre el cual el espíritu santo los ha nombrado superintendentes, para pastorear la congregación de Dios, que él compró con la sangre del [Hijo] suyo.
Rev.1:5 y de Jesucristo, “el Testigo Fiel”, “El primogénito de los muertos”, y “El Gobernante de los reyes de la tierra”.
Al que nos ama y que nos desató de nuestros pecados por medio de su propia sangre 6 —e hizo que fuéramos un reino, sacerdotes para su Dios y Padre—, sí, a él sea la gloria y la potencia para siempre. Amén.
... 5:9 Y cantan una canción nueva, y dicen: “Eres digno de tomar el rollo y de abrir sus sellos, porque fuiste degollado y con tu sangre compraste para Dios personas de toda tribu y lengua y pueblo y nación, 10 e hiciste que fueran un reino y sacerdotes para nuestro Dios, y han de reinar sobre la tierra”.