Según Lovecraft, el arte oscuro de sus obras esta vivo en un libro de saberes arcanos y magia ritual, cuya sola lectura provoca la locura y la muerte. Pueden hallarse en él fórmulas olvidadas que permiten contactar con unas entidades sobrenaturales de un inmenso poder. También incluye multitud de rituales para despertar de su sueño eterno a los antiguos, quienes desean recuperar lo que alguna vez fue suyo. Se supone dividido en cuatro libros:
Libro I: Dividido en 42 capítulos, cuenta las grandezas de los Primigenios y sus legiones; y el esplendor de los Dioses Libro II: Dividido en 19 capítulos, en los que habla sobre lo acontecido en el año de la muerte y el temido Nyarlathotep. Libro III: Separado en 36 capítulos en los que narra acerca de la magia, de sus rituales, y secretos. Libro IV: Aquí se describe lo escrito en el Libro del Destino, que anuncia lo que sucederá en la sagrada Orden.
Quizás la cita más famosa que se desprende del Necronomicón en la narrativa de Lovecraft sea:
«Que no está muerto lo que yace eternamente, / y con el paso de los extraños evos incluso la muerte puede morir».
El Necronomicón aparece en gran parte de los escritos de Lovecraft, que cita también otros libros de magia, como De vermis mysteriis (que se traduce del latín como "Sobre los misterios del gusano") y Le culte des goules (que en francés quiere decir "El culto de los gules"), atribuido al Conde D'Erlette (un guiño a August Derleth, discípulo de Lovecraft). Otros de los libros, reales o no, que aparecen en las ficciones de Lovecraft son: los fragmentos o manuscritos pnakóticos; Image du Monde, de Gauthier de Metz y "El gran dios Pan" de Arthur Machen.
Obviamente el libro es ficticio, ya que Lovecraft en repetidas ocasiones lo afirma en correspondencia que sostuvo con su círculo de amigos. De hecho, el famoso árabe loco Abdul Alhazred no es más que un apodo que él mismo se puso en la infancia, inspirado en la reciente lectura de Las mil y una noches (Alhazred = all has read, el que lo ha leído todo).
Lovecraft logró hacer un excelente engaño al dar presuntos datos respecto al Necronomicón. Por ejemplo, señalaba que quedaban muy pocos ejemplares de tal libro "prohibido" y "peligroso". En el cuento "El horror de Dunwich" se ubican ejemplares en la Universidad de Buenos Aires, en la Universidad de San Marcos de Lima, en la Biblioteca de Widener de Harvard, la Biblioteca Nacional de París, en el Museo Británico y en la inexistente Universidad de Miskatonic en la ciudad de Arkham (que aparece repetidamente en los cuentos de Lovecraft). Tanto es así que muchos creen efectivamente en la existencia de tal libro y se han dado casos de sujetos estafados al comprar los supuestos "originales" del Necronomicón.
Sin lugar a dudas, este libro tiene la fama de dar pie a las más grandes confusiones. Se pueden encontrar páginas en internet que pretenden desvelar sus misterios y hasta lugares donde se ofrece a la venta. Es frecuente que se cometan estafas, ofreciendo como "ejemplares del Necronomicón" réplicas de grimorios medievales.
Una leyenda urbana cuenta que una vez un estudiante de alguna universidad del mundo gastó la broma de incluir su ficha en el registro de la biblioteca y así el Necronomicón fue pedido insistentemente (incluso por profesores). Se dice que Jorge Luis Borges creó una ficha sobre el mismo en la Biblioteca Nacional de Argentina, así como que en el catálogo de la Biblioteca de Santander (España) aparecía también una versión latina del libro.
Numerosos escritores y artistas han intentado hacer realidad esta ficción, con lo que se han publicado muchos libros con este título. Normalmente se procura mantener el misterio y en el mismo libro no se incluyen aclaraciones explicando que es falso. Algunos de estos necronomicones son simples listados de los primigenios más conocidos, junto a símbolos y oraciones sin significado imitando burdamente el estilo de Lovecraft, pero existen también algunos muy cuidados, valiosos y dignos de colección. Todos ellos contienen las frases que lovecraft inventó como citas del Necronomicón en sus relatos.
El extraordinario dibujante H. R. Giger publicó una recopilación de sus dibujos bajo el título Giger's Necronomicón, en dos volúmenes, en una edición muy cuidada pensada para coleccionistas (encuadernados en piel negra, 666 ejemplares, con un holograma escondido). La factoría de ideas ha publicado también con este título un libro de relatos escritos por seguidores de Lovecraft. Cabe destacar el necronomicón de Donald Tyson (publicado en 2004 por Edaf), escrito como la biografía en primera persona de Abdul Alhazred, siguiendo el estilo literario de los escritores árabes, y que recoge y explica todos los mitos y ciudades que aparecen en los relatos de Lovecraft, incluyendo la explicación del origen del mundo con el estilo trágico de Lovecraft.
KE ME VAS A DAR SI VUELVO..... KE MEREZCA EL SACRIFICIO