Obviamente tal Dios Trinitario no es el que Jesús tenía presente cuando dijo:
“Nosotros adoramos lo que conocemos” (Juan 4:22, VM)

“Ustedes adoran lo que no conocen;
nosotros adoramos lo que conocemos, porque la salvación se origina de los judíos.


Los samaritanos tenían creencias religiosas equivocadas.
Solo aceptaban como inspirados los cinco primeros libros de las Santas Escrituras,
y únicamente según su propia recensión, llamada el Pentateuco Samaritano.
En realidad, no conocían a Dios; en cambio, a los judíos se les había confiado el conocimiento de las Escrituras


(Mateo 4:10) Jesús entonces le contestó: “¡Vete, Satanás! Porque está escrito: ‘Adora a Jehová tu Dios y sírvele solo a él’”.


(Lucas 4:8) Jesús le contestó: “Está escrito: ‘Adora a Jehová tu Dios y sírvele solo a él’”.

(Mateo 27:46) “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?”—.

(Lucas 6:12) Uno de esos días, él se fue a la montaña a orar y estuvo toda la noche orándole a Dios.

(Juan 17:3) Esto significa vida eterna: que lleguen a conocerte a ti, el único Dios verdadero, y a quien tú enviaste, Jesucristo.

(Juan 20:17) ‘Voy a subir a mi Padre y Padre de ustedes, a mi Dios y Dios de ustedes’”.

JESUS LO LLAMA MI DIOS

(Apocalipsis 3:12) ”’Al que venza lo haré columna en el templo de mi Dios,
y ya nunca saldrá de ahí.
Sobre él escribiré el nombre de mi Dios,
el nombre de la ciudad de mi Dios
—la Nueva Jerusalén que baja del cielo,
desde donde está mi Dios— y mi nuevo nombre.