Entre las visiones del apóstol Juan registradas en el libro de Revelación,
aparecen declaraciones de juicio contra “Babilonia la Grande”,
así como una descripción de ella y de su caída

En Revelación 17:3-5 se describe a Babilonia la Grande
como una mujer vestida de púrpura y escarlata,
adornada ricamente y sentada sobre una bestia salvaje
de color escarlata que tenía siete cabezas y diez cuernos.
Sobre su frente estaba escrito un nombre, “un misterio:
‘Babilonia la Grande, l
a madre de las rameras y de las cosas repugnantes de la tierra’”.
También se la describe sentada sobre “muchas aguas”,
que representan
“pueblos y muchedumbres y naciones y lenguas”. (Rev 17:1-15.)



Babilonia la Grande
El imperio mundial de la religión falsa,
que abarca todas las religiones que tienen enseñanzas y prácticas
que no concuerdan con la adoración verdadera que se da a Jehová,
el único Dios verdadero. Después del Diluvio de los días de Noé, la religión falsa tuvo su origen en Babel
(conocida después como Babilonia) (Gén. 10:8-10; 11:4-9).
Con el tiempo, las creencias y prácticas religiosas babilónicas se esparcieron a muchas tierras.
De modo que Babilonia la Grande llegó a ser un nombre apropiado para la religión falsa en conjunto.

Conceptos y prácticas religiosos de la Babilonia antigua se encuentran en las religiones por todo el mundo

Sus dioses: Había tríadas de dioses, y entre sus divinidades figuraban las que representaban
varias fuerzas de la naturaleza y unas que ejercían influencia especial en ciertas actividades de la humanidad
(Babylonian and Assyrian Religion [La religión babilonia y asiria, Norman, Okla.; 1963, S. H. Hooke, págs. 14-40).

“La trinidad platónica, que en sí era simplemente un nuevo arreglo de trinidades más antiguas
que se remontaban a pueblos más primitivos,
parece ser la trinidad racional filosófica de atributos que dio origen
a las tres hipóstasis o divinas personas de las cuales enseñan las iglesias cristianas.
El concepto de la divina trinidad de este filósofo griego [Platón] se puede hallar en todas las antiguas religiones
[paganas]” (Nouveau Dictionnaire Universel, París, 1865-1870, edición de M. Lachâtre, tomo 2, pág. 1467).