Porque yo soy la primera y la última.
Yo soy la honrada y la despreciada.
Yo soy la prostituta y la santa.
Yo soy la esposa y la virgen.
Yo soy la madre y la hija.
Yo soy los miembros de mi madre.
Yo soy la estéril
y muchos son mis hijos.
Yo soy aquella cuya boda es grande,
y no he tomado esposo.
Yo soy la partera y aquella que no da a luz.
Yo soy el consuelo de los dolores de parto.
Yo soy la novia y el novio,
y fue mi esposo quien me concibió.
Yo soy la madre de mi padre
y la hermana de mi esposo
y él es mi criatura.
Yo soy la esclava del que me preparó.
Yo soy la que gobierna a mi criatura,
pero él es quien me concibió antes del tiempo del nacimiento.
Y él es mi criatura a su debido tiempo,
y de él viene mi poder.
Yo soy el brazo de su poder en su juventud,
y él es el báculo de mi vejez.
Y me ocurre aquello que él desea.
(Fragmento de Nag Hammadi 6, 2)"