Yo creo que el error es no conocer el significado de las cosas, hacer un batiburrillo con: religión, política, responsabilidad, culpabilidad, creyentes, clero, religiosos, historia, actualidad, etc etc mezclando las cosas como si de un todo se tratase.
¡Claro que dentro de la iglesia ha habido gentes de todo tipo, y que ha habido Papas, obispos, y demás clérigos corruptos o que han utilizado su poder dentro de la iglesia para sus fines políticos y personales! ¡Eso es innegable!.
El pertenecer a la Igliesia (sea la que sea) no exime a nadie de cometer delitos, o lo convierte en buena persona, si fuera así.....
El problema viene cuando la Iglesia se ha confundido con la política y viceversa, y los reyes han sido papas y los papas reyes con intereses particulares o de estado.
No siempre ha sido así, y es normal en una institución que tiene más de 2000 años la fluctuación entre el poder y la persecución.
Los crímenes siempre son individuales, de otra forma serían imposibles de castigar. Otra cosa es que se cometan en nombre "de", por causa "de" por orden "de" o como justificación "de", pero la mano ejecutora siempre es una mano (salvo que colaboren varios). En otras palabras, no existe "Fuenteovejuna" (todos a una). Dentro de la Iglesia puede haber responabilidades por las causas que sean, pero la culpabilidad es del que comete el crimen.
En Nuremberg, después de la II guerra, se juzgaron a los criminales de guerra, en ningún momento se juzgó al pueblo alemán o a los que no tenían nada que ver con aquellos crímenes, y cada uno cargó con la culpa en razón a los delitos que había comentido. (y que no me venga nadie confundiendo un régimen militar con una religión)
En la época de Inocencio IV la vida humana valía lo que vale hoy un "CD" ¡nada!, no se puede evaluar la tortura, las condenas, la brujería, la muerte, los derechos de las personas....como lo podemos hacer hoy en día. Existe una diferencia abismal entre el concepto de la persona en 1200 y 2011 y hacer un paralelismo entre ambas es un error que no lleva a nada. (con esto, ni justifico ni apoyo la tortura, que aquí hay que especificarlo todo)
La religión y la política son dos cosas totalmente distintas, aunque hoy en día los políticos pretendan convertirse en líderes religiosos y viceversa, y si confundimos ambos términos, la discusión carece de sentido. La religión atiende al espíritu, no lo olvidemos, y la política a las cosas materiales, si lo liamos todo.....el lío es monumental.
Un saludo.