El problema de cocinar es que me van detrás y me presionan para que cocine más.
Cocinar es mi escape. Siempre estoy inventando. Podría vivir cocinando perfectamente.
Si me dedicara a ello me inflaría a ganar plata y amonio. Cuando estoy mal cocino. Hoy cocino. Y mañana también.
La pregunta del millón...
¿Te gusta la comida picante?