En el museo de la catedral de Valencia se conserva un vaso de calcedonia (piedra semipreciosa) de 7 cm de altura y 9,5 de diámetro (con un pie con asas añadido posteriormente), que ha sido identificado como un posible Grial. Científicos españoles lo han fechado en torno al cambio de era (siglo I), pero no procedería de Jerusalén, sino de un taller de Antioquía. Incluso dos Papas (Juan Pablo II y Benedicto XVI), en viajes que hicieron a Valencia, usaron este cáliz al celebrar sus Misas multitudinarias. Esto se considera un apoyo de la Iglesia a favor de la autenticidad de esta reliquia, aunque jamás ha sido formulado un comentario oficial.
Varios cálices se reputan como los posiblemente auténticos griales de la Última Cena. Entre ellos, además del de Valencia, el Cáliz de Antioquía de la Colección Cloisters del Metropolitan Museum of Art, o la Sacra Catina de Génova.
Si cuando lleguen las lluvias me ves parada
escurriendo tristezas,no creas que estoy llorando
si ves brillando mi cara, es tan solo la lluvia que no para...