...


Cómo sufren los hombres que se enamoran de mi!

No han sido muchos, pero si los suficientes como para que esta situación de tristeza, los acompañe a todos, transformándose en norma general

Todo comienza bien, pero a los pocos, ya los primeros síntomas de dudas y rabietas, aparecen en la relación.
Hasta no hace mucho tiempo, tenía la duda de que si sería yo la culpable de hacerlos desdichados. Por suerte y por fin, sin ayuda de analista o psicólogo alguno, ya esa interrogante no me quita más el sueño.

Realmente soy yo la única causante!

Pero no solo descubrí mi culpa, sino que también la causa:
Hombre que se enamora de mí sufre más que un beduino, porque yo soy...

Antes de continuar, les voy a dar algunos ejemplos:

Desde hace algunos años, gané mi independencia financiera. Aunque parezca una cosa normal, a los hombres no les agrada mucho. Ni que hablar, si mi salario o mi posición dentro de nuestras respectivas empresas, es mejor que la de él. Ahí ya comienza a sentirse incómodo.

Yo tengo varias vacas sagradas, que nadie puede tocar ni alejarme de ellas. Mi familia, mi patota de amigos, mis espacios físicos y espirituales, mi libertad de movimiento, la privacidad total de agendas, computador, histórico de mi celular y sus mensajes, la prioridad que tiene mi trabajo sobre cualquier otro compromiso particular, y otro montón de cositas.

En mi patota, todos tenemos marido, o novio, o amante o estamos momentáneamente cerrados para balance. Cuando programamos reuniones, se avisa: entrada libre. Ahí podemos ir acompañadas de nuestro “peor es nada”. Pero cuando la cosa es cerrada para intrusos, ahí nuestras medias naranjas, se tienen que aguantar y esperar en casita o en la esquina.

¡Que rabia les da saber que mi patota tiene más hombres que mujeres!
La cabecita les trabaja a millón y casi sin quererlo, suben otro escalón hacia la infelicidad.

-¿Otra vez vas a salir con tus amigos? ¿A que hora vas a volver? ¿Quieres que te lleve? ¿Te voy a buscar? Está tan peligroso andar sola de noche!
-No te preocupes...Fulano me trae.
-Ahhhhhggg Fu...Fu....Fulano... El que trabaja en la telenovela de las 20?
-Ese mismo, hace años que nos conocemos. Es un dulce, no?
-Ahhhgggg ñiteojro...fhyurtpo..
-Que dijiste?
-Nada....nada...

Ya les conté que trabajo en un medio de información. Lo lógico es que mis amigos sean también del ramo. En mi patota hay hasta un reportero que me vio nacer. Pero nuestros “partenaires”, se imaginan que nuestras reuniones, son orgías de sexo desenfrenado, donde el vale todo impera.
Ni que hablar cuando uno tiene que viajar varios días y él sabe que en el grupo, van todos esos “bombones” por los que las mujeres se babean una hora por noche, frente a la TV.

Realmente los hago infelices.

Cuando se ponen medio “recriminosos”, dulcemente les digo:

-Calladito... Ud. me conoció así....Además el martes, siempre estuvo primero que el miércoles.

Podría darles mil ejemplos, pero no es necesario.
Lo triste es cuando el hombre que comparte nuestros días (y nuestras noches) comienza a transformarse en mujer. Ahí la cosa ya se pone casi insoportable para mi gusto:

-Hola querido, cómo fue tu día hoy?
-.................
-¿Qué te pasa? No me vas a dar un beso?
-..............................
-Porqué estás con esa trompita y de carita triste?
-Pensé que llegarías más temprano, Esquizo.
-Es la hora habitual...
-Pensé que iríamos a cenar, o algo así...Veo que te olvidaste, no?
-Olvidarme de que?
-Ves..Nunca vi una mujer tan insensible como tu!!!
-Pero que hice ahora, amorcito?
-Te olvidaste que hoy cumplimos 2 años del primer beso...
-Ahhhh. Nunca gravé esa fecha en mi cabeza, porque no pensé que la cosa seguiría.
-Loooooooooogico, ¿A cuantos besaste hoy y lo escribiste en tu maldita agenda con password, para no olvidarte?
-Pero cariño...
-Llega....esto se acabó!


Retorno a la frase del comienzo:
“Persona que se enamora de mí, sufre más que un beduino, porque yo soy...”


Hombre!!!


Bueno...Hombre, hombre no.
Pero pienso y actúo como tal.
Y no hay cosa peor para ellos, que probar de su propia medicina.
:001_tt2:


...