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La lore dice que no está bien que haga un post atrás del otro. Que lo hago para estar siempre en los primeros lugares del subforo y que eso es injusto. Un poco atolondrada esta chica, no?
No lo hago por eso.
Hay veces que tengo ganas de escribir y soy una ametralladora. Otras veces las Musas no acuden y no hay forma de que salga nada leíble.

No sirvo para dosificar mis escritos. Si los escribo es para que los lean, ¿porqué los voy a dejar en un archivo, para una siguiente oportunidad? Ella confunde competitividad con deseos de comunicación.
Soy muy competitiva. Pero no aquí, donde no hay ni fósforos usados para ganar.
Este hilo comenzó y sigue de la misma manera. Que parece un blog? Es posible.
¿Que no motiva a participar? Eso está más que reconocido.
Pero yo no le doy bola a eso. Sigo fiel a lo que escribí en la primera página de este hilo hace unos meses: “Este es mi diario intimo público”. El que lo quiere leer, bienvenido. El que quiere comentar algo, idem.
Es posible que el hecho de tener un “lay-out” diferente, llamó a la discordia. Pero pienso que sería ridículo abrir un nuevo tema para cada publicación.
En fin, Hablando de bueyes es un transgénico y lo advierte en su rótulo. Riesgo avisado al que lo consuma.
Todo este preámbulo, viene a que pese a no tener conexión a Internet en donde estoy acampando, no por eso dejo de escribir. Por eso es que cuando esporádicamente me conecto, los bombardeo con cosas que digito en momentos de descanso.
Mi Padrino Pana pesca.
Don Pablo se abraza a Jack Daniel o alguna turista (o a ambos al mismo tiempo).
Malvado grita en el estadio apoyando esos once pataduras de Potros de Hierro.
Yo escribo.

Cada uno es feliz a su manera.


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