Las Estrategias digitales han experimentado una transformación radical impulsada por la innovación tecnológica. Inicialmente centradas en la presencia web y redes sociales, hoy exploran territorios inmersivos como el metaverso para optimizar su alcance e impacto. Este universo virtual ofrece oportunidades sin precedentes para las marcas.
A través de la creación de experiencias inmersivas, las empresas pueden generar un vínculo emocional más fuerte con los consumidores, induciéndolos a la compra de manera natural. La venta de bienes virtuales, desde avatares personalizados hasta réplicas digitales de productos físicos, abre nuevas fuentes de ingresos y fomenta la propiedad digital.
Los eventos en vivo trascienden las limitaciones físicas con conciertos virtuales y lanzamientos de productos inmersivos, alcanzando audiencias globales. Asimismo, el ofrecimiento de tokens no fungibles (NFTs) se presenta como una herramienta poderosa para fidelizar clientes, brindándoles acceso exclusivo a experiencias únicas y productos diferenciados, fortaleciendo así la conexión marca-consumidor en este nuevo entorno digital.