Bueno, la verdad es que JESÚS nunca afirmó que fuera Dios.
Cuanto dijo acerca de sí mismo indica que de ninguna manera
se consideraba igual a Dios... ni en poder ni en conocimiento ni en edad.

En todo período de su existencia, tanto en el cielo como en la Tierra,
el habla y la conducta de Jesús manifiestan subordinación a Dios.
Dios es siempre el superior, Jesús el inferior que fue creado por Dios.