Creo que a tí y a muchas personas, les ha de quedar claro que NO BASTA CON LEER LA BIBLIA, hay que saberla interpretar, y esto que pareciera tan fácil, no es tan fácil, de ahí la existencia de miles y miles de apóstatas sectas que se dicen iluminadas.
Buscas que yo o cualquier otro participante te de la respuesta que ya tienes en mente, y si la respuesta no coincide con ella, vas a hacer lo que los testiguillos, vas a formar una polémica tremenda con ello.
¿Porqué mejor no buscas la respuesta tu misma en el estudio de la Biblia?; no digo que te conviertas o le creas a la Biblia, estudiala bajo las ciencias literarias.
Tienes la Hermenéutica: es una parte que establece la mediación entre el antiguo texto y el hombre contemporáneo, y que con métodos más apropiados, hace el texto vivo y actual.
Tienes la Heurística, que es parte de la hermenéutica, que descubre los distintos sentidos de la Biblia por las enseñanzas del Magisterio.
Trata de no interpretar al pie de la letra el texto, sino tratar de buscar el sentido que le dio el autor mismo de ese texto, el auditorio a quien se dirigía, la situación de su tiempo y el género literario empleado, analiza el género literario en que está escrito ese libro de la Biblia.
Descubre la historia literaria del libro o pasaje bíblico en cuestión, ubicando la época y cultura en que se escribió y así conocer la intención teológica del autor.
Toma en cuenta que nosotros interpretamos con sentido espiritual y creemos que este supera el conocimiento humano. Se desprende no de las palabras sino de las realidades que se ocultan bajo esas palabras. Vemos el texto a la luz de la totalidad de la Escritura, a la luz de la Tradición y echando mano de la analogía de la fe.