Deuteronomio

DT 2:33-34 Los israelitas destruyen completamente a los hombres, mujeres y niños de Sehón.

DT 3:6 Los israelitas destruyen completamente a los hombres, mujeres y niños de Og.

Dt 7,2 El Señor ordena a los israelitas a «destruir por completo» y mostrarse «sin piedad» a aquellos a quienes queden después de ser derrotados.

7:2 El Señor, tu Dios, los pondrá en tus manos, y tú los derrotarás. Entonces los consagrarás al exterminio total: no hagas con ellos ningún pacto, ni les tengas compasión.

7:3 No establezcas vínculos de parentesco con ellos, permitiendo que tu hija se case con uno de sus hijos, o tomando una hija suya por esposa de tu hijo.

7:4 De lo contrario, ella apartará de mí a tu hijo y lo hará servir a otros dioses. Entonces el Señor se irritará contra ustedes y enseguida los exterminará.

DT 20:13-14 «Cuando el Señor la ponga en tu mano, pasa a cuchillo a todos los hombres… En cuanto a las mujeres, los niños, el ganado y todo lo demás en la ciudad, podéis tomar estos como botín para sí mismos.»

20:10 Cuando te acerques a una ciudad para atacarla, primero le ofrecerás la paz.

20:11 Si ella la acepta y te abre sus puertas, toda la población te pagará tributo y te servirá.

20:12 Pero si rehúsa el ofrecimiento de paz y te opone resistencia, deberás sitiarla.

20:13 Cuando el Señor, tu Dios, la ponga en tus manos, tú pasarás al filo de la espada a todos sus varones.

20:14 En cuanto a las mujeres, los niños, el ganado y cualquier otra cosa que haya en la ciudad, podrás retenerlos como botín, y disfrutar de los despojos de los enemigos que el Señor, tu Dios, te entrega. (Nota: una forma muy apropiada esa de llamar «despojos» a las mujeres e hijos, tratandolos como si de un objeto se tratase)

20:15 Así tratarás a todas las ciudades que estén muy alejadas de ti y que no pertenezcan a las naciones vecinas.

DT 20:16 «En las ciudades de las naciones que el Señor te da por herencia, no dejaras nada vivo que respire«.

DT 21:10-13 Con la aprobación del Señor, a los israelitas se les permite tomar «mujeres hermosas» del campamento enemigo para ser sus esposas cautivas. Si después de las relaciones sexuales el marido no tiene «alegría» de su esposa, puede simplemente dejarla ir.

DT 28:53 «Usted va a comer el fruto del vientre, la carne de los hijos e hijas al Señor tu Dios te ha dado.»