JESUCRISTO NO SE OFRECIÓ EN SACRIFICIO, porque NO LE AGRADABAN LOS SACRIFICIOS

[Roberto0]

Esta Ley que Jesucristo nos enseñó en el Evangelio es la Ley con la que Jesucristo cumplió, pues es la verdadera Ley de Dios, la Ley que realmente había dado Dios desde antiguo. Y es que la Ley de Dios había sido cambiada en mentira por los escribas (Jeremías 8:7-8.), y por eso las leyes del viejo testamento se hicieron un pacto viejo (Hebreos 8:13), defectuoso (Hebreos 8:6-7) y una carga que nadie podía soportar (Hechos 15:10-11), y por eso Jesucristo lo abolió (Hebreos 7:18-19 y Hebreos 8.).

Jesucristo, como Dios que es, fue el que entregó los mandamientos a Moisés... Y los mandamientos que nos entrega Jesucristo en el Evangelio son los únicos y verdaderos mandamientos de Dios que realmente había recibido el pueblo en tiempos de Moisés...

Así es, Jesucristo con la única ley que no vino a cumplir, es cola de los mandamientos y preceptos de hombres que El abolió.

[Jandulilay]

Así es, Jesucristo con la única ley que no vino a cumplir, es cola de los mandamientos y preceptos de hombres que El abolió.

Jesús demostró que un hombre perfecto puede cumplir con la Ley de Dios perfectamente,tal como él la cumplió, pero ningún humano imperfecto no podía, y por eso en se hacían sacrificios por los pecados humanos. Pero todos sacrificios eran como un tutor que conducía a Cristo como el "Cordero de Dios". Por eso Jesús tuvo que sacrificar su vida una vez para siempre.
Los Testigos cristianos de Jehová siempre pedimos perdón a Jehová mediante Cristo Jesús.

Y lo que Jesús condenó de los líderes religiosos (fariseos y saduceos) fue que ataban cargas pesadas sobre el pueblo que ni ellos mismos cumplían.

Jesús dijo a las muchedumbres:

"Por eso, todas las cosas que les digan, háganlas y obsérvenlas, pero no hagan conforme a los hechos de ellos, porque dicen y no hacen.
Atan cargas pesadas y las ponen sobre los hombros de los hombres, pero ellos mismos ni con el dedo quieren moverlas.
Todas las obras que hacen, las hacen para ser vistos por los hombres; porque ensanchan las cajitas que contienen escrituras que llevan puestas como resguardos, y agrandan los flecos [de sus prendas de vestir.
Les gusta el lugar más prominente en las cenas y los asientos delanteros en las sinagogas,
y los saludos en las plazas de mercado, y el ser llamados por los hombres Rabí".

[Elisabet*]

Así es, Jesucristo con la única ley que no vino a cumplir, es con la de los mandamientos y preceptos de hombres que El abolió.

Jesús demostró que un hombre perfecto puede cumplir con la Ley de Dios perfectamente,tal como él la cumplió, pero ningún humano imperfecto no podía, y por eso en se hacían sacrificios por los pecados humanos. Pero todos sacrificios eran como un tutor que conducía a Cristo...

La verdadera Ley de Dios era perfecta y no mandaba sacrificios sino que mandaba misericordia.

[misericordia]

La verdadera Ley de Dios era perfecta y no mandaba sacrificios sino que mandaba misericordia.

Así es Elisabet, Dios no quiere sacrificios sino misericordia, pues así dice el Evangelio.

"Si hubierais comprendido qué quiere decir: "Misericordia quiero, y no sacrificios", no condenaríais a los inocentes" (Mateo 12:7)

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[KIMO]

Asi es como tu dices
Los hombres han presentado ofrendas a Dios desde tiempos remotos.
Las primeras ofrendas de las que hay registro son los frutos del suelo
que presentó el hijo mayor de Adán, Caín,
y los primogénitos del rebaño que ofreció su hijo más joven, Abel.

Tanto la actitud como los motivos debieron diferir, pues Dios aprobó la ofrenda de Abel
pero miró con desaprobación la de Caín.

Más tarde, el pacto de la Ley reguló tanto las ofrendas de animales
como las ofrendas de grano.

Aqui Abel debió haber tenido fe en la promesa de liberación de Dios
por medio de la Descendencia prometida y seguramente entendía que se debía derramar sangre,
es decir, que alguien tendría que ser ‘magullado en el talón’
para que la humanidad pudiese recuperar la perfección que Adán y Eva habían perdido. (Gé 3:15.)

Debido a que se reconocía pecador,
su fe lo movió a presentar una ofrenda que requería derramar sangre,
prefigurando así con exactitud el verdadero sacrificio por los pecados: Jesucristo. (Gé 4:1-4; Heb 11:4.)

[misericordia]

Asi es como tu dices
Los hombres han presentado ofrendas a Dios desde tiempos remotos.
Las primeras ofrendas de las que hay registro son los frutos del suelo

Tanto la actitud como los motivos debieron diferir, pues Dios aprobó la ofrenda de Abel
pero miró con desaprobación la de Caín.

Más tarde, el pacto de la Ley reguló tanto las ofrendas de animales
como las ofrendas de grano.

Aqui Abel debió haber tenido fe en la promesa de liberación de Dios
por medio de la Descendencia prometida y seguramente entendía que se debía derramar sangre,
es decir, que alguien tendría que ser ‘magullado en el talón’
para que la humanidad pudiese recuperar la perfección que Adán y Eva habían perdido. (Gé 3:
Heb 11:4.)

Tú eres muy judaizante, y tienes como tradición todas las tradiciones judías del viejo testamento, pero tienes poco en cuenta las enseñanzas y mandamientos del Evangelio. Y es lo que debes seguir si quieres llamarte cristiano.

Esto es que sigas fielmente lo que te enseña y manda Jesucristo en el Evangelio.
Pues Jesucristo así te dice:

"todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque ésta es la ley y los profetas". (Mateo 7:12)

"........ si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo:

No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo.

El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme.

Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones. Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos. Otra vez os digo, que es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios". (Mateo 19:16-24)

[KIMO]

Pero mira que tu eres un buen cristiano Kimo
y lo bien que explicas las cosas
con textos biblicos y todo
muy bien asi se hace

Asi es como tu dices
Los hombres han presentado ofrendas a Dios desde tiempos remotos.
Las primeras ofrendas de las que hay registro son los frutos del suelo
que presentó el hijo mayor de Adán, Caín,
y los primogénitos del rebaño que ofreció su hijo más joven, Abel.

Tanto la actitud como los motivos debieron diferir, pues Dios aprobó la ofrenda de Abel
pero miró con desaprobación la de Caín.

Más tarde, el pacto de la Ley reguló tanto las ofrendas de animales
como las ofrendas de grano.

Aqui Abel debió haber tenido fe en la promesa de liberación de Dios
por medio de la Descendencia prometida y seguramente entendía que se debía derramar sangre,
es decir, que alguien tendría que ser ‘magullado en el talón’
para que la humanidad pudiese recuperar la perfección que Adán y Eva habían perdido. (Gé 3:15.)

Debido a que se reconocía pecador,
su fe lo movió a presentar una ofrenda que requería derramar sangre,
prefigurando así con exactitud el verdadero sacrificio por los pecados: Jesucristo. (Gé 4:1-4; Heb 11:4.)

[misericordia]

Pero mira que tu eres un buen cristiano Kimo
y lo bien que explicas las cosas
con textos biblicos y todo
muy bien asi se hace

Tú no predicas el Evangelio como Jesucristo lo enseñó. Pues Él mandó:
" Si quieres entrar en la vida guarda los mandamientos" y tú nunca los recuerdas.

[KIMO]

tú no predicas el evangelio como jesucristo lo enseñó. Pues él mandó:
" si quieres entrar en la vida guarda los mandamientos" y tú nunca los recuerdas.

\lo bien que explica las cosas kimito
tu te mandas a correr jajajaajaj
jiiiiiajoaji ajajajajaajaj

[Elisabet*]

lo bien que explica las cosas kimito
tu te mandas a correr jajajaajaj

Tú no predicas bien las cosas porque nunca predicas los mandamientos que Jesucristo enseña en el Evangelio y que Él mandó guardar para entrar en la vida.

Tú no predicas el Evangelio como Jesucristo lo enseñó. Pues Él mandó:
" Si quieres entrar en la vida guarda los mandamientos" y tú nunca los recuerdas.