Vigésimo sexto asesinato (masacre) de Jehová (Yahveh).
(“…hombres, mujeres y niños, sin dejar supervivientes”)
33 Yahveh nuestro Dios nos lo entregó y le derrotamos a él, a sus hijos y a todo su pueblo.
34 Nos apoderamos entonces de todas sus ciudades y consagramos al anatema toda ciudad: hombres, mujeres y niños, sin dejar superviviente.
35 Tan sólo guardamos como botín el ganado y los despojos de las ciudades tomadas.
(Deuteronomio 2:33-35 - Biblia de Jerusalén).
NOTA.- Recuerdo que este dios asesino es el papá de vuestro Jesucristo.
La Verdad nos hará libres.
Vigésimo séptimo asesinato (masacre) de Jehová (Yahveh).
(En otro de los crímenes relatados he comentado que el AT es la historia del pueblo Judío. Bueno, pues me retracto. Más bien es la historia de un pueblo salvaje entre los salvajes. Y como tal pueblo salvaje, en el año 135 d. e. c., se le aplicó el anatema que él aplicaba a otros pueblos).
3 Yahveh nuestro Dios entregó en nuestras manos también a Og, rey de Basán, con todo su pueblo. Le batimos hasta no dejarle ni un superviviente.
4 Nos apoderamos entonces de todas sus ciudades; no hubo ciudad que no les tomáramos: sesenta ciudades, toda la confederación de Argob, reino de Og en Basán,
5 plazas fuertes todas ellas, con altas murallas, puertas y cerrojos; sin contar las ciudades de los perizitas, en gran número.
6 Las consagramos al anatema, como habíamos hecho con Sijón, rey de Jesbón: anatema a toda ciudad: hombres, mujeres y niños;
7 aunque guardamos como botín todo el ganado y los despojos de estas ciudades.
(Deuteronomio 3:3-7 - Biblia de Jerusalén)
NOTA.- Y, recuerdo, el asesino del AT, Yahveh, es el dios de los Cristianos. Un impresentable.
La Verdad nos hará libres.
La Verdad nos hará libres.
Vigésimo octavo asesinato (masacre) de Jehová (Yahveh).
(Me preocupa que el pueblo judío de ahora tenga la misma índole que tenía antaño. Y más me preocupa que sea respaldado por el pueblo que ha utilizado la Bomba Atómica).
21 Consagraron al anatema todo lo que había en la ciudad, hombres y mujeres, jóvenes y viejos, bueyes, ovejas y asnos, a filo de espada.
(Josué 6:21 - Biblia de Jerusalén)
La Verdad nos hará libres.
Vigésimo noveno asesinato (masacre) de Jehová (Yahveh)).
(«Así Yahveh se calmó del furor de su cólera». Si yo creyera en semejante dios, no viviría tranquilo el resto de mis días. Y mi salvación estaría supeditada al “furor de su cólera”. En una palabra ¡Que nadie lo tiene claro!).
24 Entonces Josué tomó a Akán, hijo de Zéraj, con la plata, el manto y el lingote de oro, a sus hijos, sus hijas, su toro, su asno y su oveja, su tienda y todo lo suyo y los hizo subir al valle de Akor. Todo Israel le acompañaba.
25 Josué dijo: «¿Por qué nos has traído la desgracia? Que Yahveh te haga desgraciado en este día.» Y todo Israel lo apedreó (y los quemaron en la hoguera y los apedrearon).
26 Levantaron sobre él un gran montón de piedras, que existe todavía hoy. Así Yahveh se calmó del furor de su cólera. Por eso se llama aquel lugar Valle de Akor hasta el día de hoy.
(Josué 7:24-26 - Biblia de Jerusalén)
La Verdad nos hará libres.