2Tim.3:13 (...) los hombres inicuos e impostores avanzarán de mal en peor, extraviando y siendo extraviados.
Dan.11:33 Y tocante a los que tienen perspicacia entre el pueblo, impartirán entendimiento a los muchos. (...)
... 12:10 Muchos se limpiarán y se emblanquecerán y serán refinados. Y los inicuos ciertamente actuarán inicuamente, y absolutamente ningún inicuo entenderá; pero los que tengan perspicacia entenderán.
Uno de los perfumes más caros del mundo en la actualidad está hecho de caca de cachalote, el resto de perfumes de las glándulas sexuales de distintos animales.
Parece que los egipcios de hace más de 5.000 años tenían razón, por eso ellos fueron civilización y los judíos no.
Los nazis eran muchos más millones que vosotros y no por ello tenían razón aunque tuvieran muchos más seguidores. Así de breve y de simple.
Si en la tierra solamente estuviera mi familia y yo, mi familia y yo no seríamos ni buenos ni malos. No habría nadie para juzgarnos.
Ni siquiera aparecería dios alguno, para afearnos nuestros actos.
Para que mi familia y yo seamos buenos o malos, tiene que haber otra familia que me juzgue, y, a la vez, esta familia será buena o mala según el dictamen de mi familia.
¿Qué es bueno? ¿Qué es malo?
La Verdad nos hará libres.
Eso es relativo Tomás, el bien o el mal es un baremo propio de nuestro ser.
Por ponerte un ejemplo si estuviéramos solos en el Planeta maxicatag, kimo y yo, tan solo quedaría yo por habérmelos cargao a los dos, aunque fuera consciente de que no era lo correcto, este acto sería inevitable para poder continuar con mi vida en paz jajaja.
Ni el bien ni el mal se juzgan, se juzga el saltarse una normativa o ley.
El capítulo seis de la Biblia no tiene desperdicio. El famoso Diluvio Universal le eleva a los capítulos más interesantes. Pero, a lo que vamos:
En él aparecen unos hijos de Dios (ignoramos si de derechas o de izquierdas), que se follan a las mejores hijas de los hombres. La Biblia no explica quiénes les prestaron los cuerpos para la copulación, ya que se supone que los hijos de Dios son espíritus.
Pero no nos paremos en zarandajas. Se mencionan a unos nuevos personajes, los “nefilim”; ¡ojo: terminado en M! En otras biblias: “Gigantes”.
Pero aquí hay un error de interpretación. Los “nefilim” y los “gigantes” nada tienen que ver con los hijos que los hijos de Dios engendraron en las hijas de los hombres. Con claridad meridiana, la Biblia dice: “y ellas les daban hijos: estos fueron los héroes de la antigüedad, hombres famosos”.
¿Qué hombres famosos? ¿Aquiles? ¿Héctor? ¿Ulises? ¿Perseo?
Sea como fuere, los hijos engendrados por los hijos de Dios en las bellas mujeres de los hombres, ni eran “nefilim”, ni eran gigantes,
“Cuando la humanidad comenzó a multiplicarse sobre la haz de la tierra y les nacieron hijas,
2 vieron los hijos de Dios que las hijas de los hombres les venían bien, y tomaron por mujeres a las que preferían de entre todas ellas.
3 Entonces dijo Yahveh: «No permanecerá para siempre mi espíritu en el hombre, porque no es más que carne; que sus días sean 120 años.»
4 Los nefilim existían en la tierra por aquel entonces (y también después), cuando los hijos de Dios se unían a las hijas de los hombres y ellas les daban hijos: estos fueron los héroes de la antigüedad, hombres famosos”.
(Génesis 6:1-4 - Biblia de Jerusalén)
La Verdad nos hará libres.
Jamás comprenderás la inmensidad de La Nada.
Lo único que dejan claro es que estaban más salidos que el pico de una plancha. Siempre lo mismo mujeres guapas utilizadas para el sexo. Jamás dice hombres guapos, eso sí al único que pone de guapo es a satanás.
Que les compre quien los entienda a estos cristianos y sus gilipolleces.