Lo que se menciona es una de las peores políticas de la secta.
Se impide que alguien la abandone, porque quienes abandonan son sometidos a un asesinato social.
Durante su permanencia en la secta, los TJ no tienen relaciones sociales con quienes no pertenecen al grupo.
Así, cuando alguien abandona la secta, no conoce a nadie, no tiene a quien recurrir.
Y precisamente eso es lo que les merece el nombre de "secta".

Notoria diferencia con otras religiones.