Es cierto que las biblias traducidas sí pueden contar con notables diferencias entre sí, aunque sean pocas, sí se contradicen. Hay unas que llaman al Ungido Jesús y otras Yeshua, esa es una contradicción. Sin embargo, las copias antiguas no encuentro que se contradigan. De hecho, todas coinciden en que el nombre del Ungido es Ieshu.
Esto aclarando que en griego no había algo que suene como la shin hebrea, por eso Iesu. Pero en hebreo solamente hay un nombre que significa salvación: Ieshu (que antiguamente se escribía como Ieshua o Yeshua).
Las copias antiguas de los evangelios no usan ni Jesús ni Yeshua, sino Ieshu.