"Dios compasivo y bueno, lento para ira y grande en misericordia y verdad".
Dawid.


Si hay algo que he aprendido mejor es que Dios es misericordioso pues como decía:

Cita Iniciado por Wigberto Ver Mensaje

Pero, aunque parezca locura, después de aquello seguí practicando el pecado, sin embargo esa es otra historia que si Dios quiere podré contar después...
Me parece que es momento de continuar con el relato, pero antes de entrar en el tema agregaré algunas cosas:

Yo nací en una familia con tendencia al cotolicismo romano, por ello considero que fui católico hasta cierta edad, como hasta los 11 o 13 años. Luego de ello no sé lo que fui. Quizás no pensaba tanto en cosas religiosas, pero la memoria me hace pensar que fui creyente en algún ser sobrenatural (que no era Dios) que abarcaba las creencias de todas la religiones (llámense cristianas o no).

Más o menos en aquella época experimenté un acontecimiento muy extraño, pudiera decirse que fuera de lo común o normal. Sin embargo, al parecer, con el tiempo dejé de darle importancia.

Cuando tenía como 15 años me incliné al ateísmo y así seguí como hasta los 18.

Llegué a escribir trabajos a mis profesores en el colegio y en la universidad enfocados en mi punto de vista ateo. Como pueden entender, yo no creía en ningún ser divino, para mi la biblia era un invento de hombres, sostenía que el hombre se había inventado a los dioses.

Sucede que un día simplemente pensé, algo así como mirar el cielo y ver las estrellas y llegar a la conclusión de que tenía que haber un creador.

Poco después comencé a leer la biblia. Recuerdo que la leí casi completa, pero considero que en aquel entonces no me quedó casi nada de su lectura, aún así seguí creyendo que contenía la verdad.

Con el tiempo fui aumentando mi conocimiento, gracias a Dios, y llegue a reconocer cosas como que solo hay ser o "persona" que es Dios. Me fue complicado tener que admitir que los "pastores" que seguía estaban equivocados en algo tan importante como lo es el conocimiento de Dios. Y que Yiesou (en aquel entonces lo llamaba por otro nombre) no era Dios.

El tiempo fue transcurriendo, fui aprendiendo algunas cosas más de la escritura, pero lamentablemente no fui muy piadoso, mi conducta no era correcta delante de Dios. Había formulado la errónea idea de que podía pecar y luego pedir perdón y sería perdonado sin importar lo que hubiera hecho.

Me decía cristiano (seguidor del ungido hijo de Dios), pero practicaba el pecado.

Fueron como siete u ocho años en los que estuve realizando aquella cosa tan mala que describo, hasta que sucedieron los siguientes acontecimientos.

Ahora llegamos a la parte donde comenzaré a entrar en el tema. Contaré este relato sin especificar o detallar los acontecimientos:

Sucede que hace como tres años estaba usando Internet cuando comencé a notar lo que llamo "extrañas coincidencias", y la cosa comenzó a captar mi atención hasta que me terminó enganchando, al punto de que hasta hoy sigo considerando la posibilidad de que fuera, hasta cierto punto, real lo ocurrido.

Cuando digo "real lo ocurrido" no me refiero a los acontecimientos en si mismo, sino a la intervención o no de humanos en los acontecimientos. Pues considero que, en efecto, algo ocurrió aunque no fuera algo normal.

La cuestión es que no solo fue Internet, sino que las "extrañas coincidencias" comenzaron a ocurrir en mi entorno.

Lo más relevante de aquello es que comencé a "consultar la biblia" de una forma no convencional, al menos en base a lo que ella misma nos cuenta. Yo hacía una pregunta sobre un tema, abría la biblia y encontraba temas que les notaba mucha relación con la pregunta. Y eso fue constante, lo hacía una y otra vez y se repetía el mismo fenómeno.

Luego de esas "extrañas coincidencias" comenzaron a ocurrir cosas que, en el momento, no noté lo ofensiva que eran para Dios, pues no tenía un conocimiento adecuado de las escrituras.

Comencé a interactuar como telpáticamente con personas, algunas conocidas. Sigo considerando que aquello puede tener una explicación, incluso en la tecnología, pero no lo puedo asegurar. Como tampoco puedo asegurar que las personas con las que hablaba eran realmente ellas.

Ninguno de los que reconocí era difunto, aunque sí se me sugirió que habían muertos vivos y que me estaban viendo.

Se me indicó que el Dios de la biblia no es el Dios verdadero. Pues se me sugirió, en resumen, que el verdadero creador está con todas las religiones cristianas, algo así como que todas las religiones conducen al mismo ser, pero dicho ser no es el Dios de Abraham, de Yisaac y de Yiakob, pues la descripción que me indicaron no coincide con la biblia.

Me fueron indicadas cosas como que el hombre llegaría a ser como Dios, teniendo dominio sobre un mundo, que Dios y el diablo son parte de una misma familia o casa, y se comparó la santidad de Dios con simples humanos (cosa grave).

Debido a todo aquello, no tuve mucho descanso en aquel entonces, máxime porque llegue a considerar también que había cometido una grave ofensa contra Dios.

Los dolores tampoco se ausentaron en aquel entonces. Una noche tuve un fuerte dolor, y luego de un rato de caminar de un lado a otro me senté y una voz me dijo algo como "Jesús es dios" y se me sugirió que era el Dios verdadero. En ese momento sentía una presencia que subía y bajaba en el lugar en donde estaba.

Cabe mencionar que los acontecimientos que describo ocurrieron principalmente en una casa que estaba llena de imágenes religiosas de la religión católica.

Después de aquello, cuando esa etapa comenzó a pasar, escuché una voz que me dijo "ve a la iglesia", sin embargo no se me indicó cuál. Pero fui con un pastor evangélico. Le describí algunas cosas pero no le detallé mucho.

A partir de entonces el problema fue algo que nunca antes, que recuerde, me había ocurrido. Una insistente voz, impulso, o algo, que (no sé de dónde provenía) insultaba gravemente a Dios. Yo trataba de bloquearla y repetía cosas buenas sobre Dios en mi mente.

Sin embargo, todo el asunto dejó secuelas, una de ellas y quizás la más notoria fue que comencé a dudar de la biblia y más que eso, dejé de creer en ella, considerando que Dios no era como lo describe la biblia y que quizás la biblia era producto de la mente humana. También dejé de orar.

Pero eso no duró mucho, gracias a Dios volví a buscar en la biblia. Sin embargo, también comencé a regresar a la normalidad, en el sentido de que comencé a seguir haciendo cosas nuevas de las que la gente suele hacer, y fui dejando atrás aquellos acontecimientos al punto que con el pasar de unos meses fue como si nunca hubieran pasado.

Pues fue por aquel entonces que ocurrió lo del dolor que describo al inicio del tema. Había hecho cosas muy malas, pensaba que no sería perdonado, pero entonces oré y Dios fue misericordioso y me quitó aquel dolor.

Pese a todo lo que he contado, volví a lo mismo. Me fui alejando de la lectura de la biblia y comencé a alejarme de sus mandamientos y enseñanzas. Volví a la práctica del pecado y a la errónea idea de que podía pecar y luego pedir perdón. La verdad es que Dios prefiere la obediencia al sacrificio. Mejor es ser obediente que tener que pedir perdón.

Aún así, la descripción que haría de mi comportamiento es que no era muy diferente al común de la gente, quizás una que otra diferencia particular o distintiva, pero nada llamativo, pienso yo. Quizás por eso el segundo psiquiatra consideró que no era esquizofrenia sino que tenía ansiedad (puesto que no hablaba mucho, aunque con el paso del tiempo eso cambió notoriamente).

Así pues, me sucedió que me olvidé casi por completo de aquellos acontecimientos inexplicables y comencé a considerar la idea de que habían sido producto de mi imaginación, sin descartar que realmente algo había pasado, pero no de la magnitud que yo pensaba.

Entonces volvieron a comenzar a ocurrir las "extrañas coincidencias", pero yo las ignoraba, trataba de no darles mayor importancia. Además, me parece que no fueron tan impresionantes como las que antes describí. Pero sucede que ahora pienso que quizás no todo era coincidencia, algunas cosas sí, otras no.

Yo pensaba que casi nadie sabía lo que estoy contando, aunque sí tenía idea de que algunos tenían alguna idea sobre aquellos acontecimientos pues así me lo dieron a entender, aunque no hablaron de ello abiertamente.

La cuestión es que me fui dando cuenta que no eran pocas las personas que sabían del asunto, pero para llegar a ello tuvieron que ocurrir cosas primero, pues yo estaba muy distraído en cosas rutinarias del día a día. Pudiendo ser que quería olvidar aquellos extraños acontecimientos.

Por ahora concluyo, pero si Dios quiere seguiré con la otra parte del relato y la conclusión en un siguiente post...