Antes de nada te agradezco Parzival que expongas tu experiencia personal. Creo firmemente que solo conociendo casos de primera mano podemos hacernos entre todos una composición de lugar correcta. No es lo mismo hablar de lo que nos ha contado "un amigo que tiene un conocido que le pasó…", a contar algo sucedido a uno mismo.Iniciado por parzival
Aunque hacerlo así conlleva descubrir intimidades propias que gente mala podría aprovechar para no sabemos qué. Y a la vez, hablar mucho en primera persona, por desgracia crea una sensación de vanidad en quien escucha que puede restar credibilidad a un hecho verdadero.
Precisamente por todo ello, te agradezco aún más tu relato.
Si me lo permites me gustaría comentar dos cositas:
Primero. La curiosa participación de Bester69.
A pesar de que me chirrían algunas de sus afirmaciones, debo decir que me parece saludable oír opiniones discrepantes. Las ideas nuevas, los inventos, los descubrimientos, siempre surgen de quienes no siguen la ortodoxia. Aunque en la mayoría de los casos esas ideas, inventos o descubrimientos están en bruto y necesitan pulirse para llegar a ser válidos. En este sentido sé bienvenido, amigo Bester69.
De todas maneras esto no quita para que te diga que, modestamente creo que usas una técnica de dialogo agresiva que no ayuda a sumar adeptos a tus ideas. Más bien lo contrario. Y un lenguaje que, a título muy personal, me recuerda demasiado a otro usuario del que ya no se lee nada por estos lares desde hace un tiempo. ¿Es que os turnáis?, o ¿eres el mismo lobo disfrazado con la piel de otra oveja?.
(Por cierto, ya nos hemos dado cuenta de tu obsesión por las creencias: nodo50, pero a lo mejor este no es el hilo más apropiado para exponerlas.)
Dicho esto, comparto contigo mis dudas sobre el origen de la enfermedad. Y aprovecho para invitarte a buscar y leer el artículo que en la revista de divulgación "MUY INTERESANTE" (Edición en México. Nº 2 Febrero de 2014) hablaba sobre "La pandemia que viene".
A toro pasado parece que el tema estaba en el aire desde hace tiempo y que había muchas advertencias publicadas por parte de la comunidad científica, médica y gurús como Bill Gates. Pero como pasa con todas las profecías autocumplidas es fácil cuestionarse si alguien ajeno a la causa del problema, adivinó lo que iba a suceder. O por el contrario, los culpables de la causa se inspiraron en la "adivinación" para fabricar el problema.
Yo no termino de ver claro que hayan "portales orgánicos" atacándonos, más bien creo que hay mucho humano sinvergüenza avaricioso en busca perpetua de conseguir apoderarse de los bienes de los demás, a costa incluso de la vida de todos (incluida la suya) ¡que ya hay que ser imbécil!.
Otro tema. La interesante aportación que has hecho, Parzival, sobre la pérdida de olfato.
Desde hace varios años cuando sufro un episodio de gripe, vengo experimentando pérdida de olfato. En su día me di cuenta porque para limpiar la taza del váter siempre he usado amoniaco y una vez haciéndolo, le pregunté con sorpresa a mi mujer dónde había comprado la botella que estaba usando, porque a pesar de escocerme los ojos NO OLIA MAL:
El asombro de mi mujer fue mayúsculo y me sacó del cuarto de baño a empujones. Porque yo sin darme cuenta me estaba intoxicando con los gases que allí había.
Desde entonces cuando tengo una crisis de "mocos" utilizo la prueba de oler un poquito la botella de amónico y así saber si me puedo fiar de mi nariz.
Sí. Verdaderamente no oler aunque sea cómodo, es MUY PELIGROSO. Por eso me parece muy bien que se estudie el fenómeno. Aunque me resulta extraño que lo consideren un síntoma propio del Coronavirus, cuando es común en las gripes y refriados con abundancia de mocos.
¿O es que a nadie más le pasa?
Responder Citando