El atentado de Sarajevo es la espoleta que hace estallar la Primera Guerra Mundial. La causa que la motiva viene dada por la rivalidad económica de las grandes potencias. Rivalidad que se manifiesta principalmente en la sed de dominio, por las tierras africanas. Lo que extraña es que estallara en el año 1914 y no lo hubiese hecho antes. Hay quien opina que se estuvo gestando desde el año1898.
Mantener el equilibrio entre las grandes potencias suponía un gran desembolso económico. Se precisaba tener un ejército permanente; la construcción de naves de guerra, que incluso superasen en tamaño y potencia a las de otros países; armamento bélico de todo tipo, incluido el gas mostaza amen del equipo y vestuario del soldado. Prueba de ello es que la Gran Bretaña modernice su flota, bajo el mandato del Almirante John Fisher. La Alemania de Bismarsk así lo había hecho a inicios del siglo XX, en el año 1900. La razon era por sus colonias. Si en un principio el Canciller era reacio al colonialismo, después cambia de opinión.
Junto a los gastos que supone el ejército hay que añadir la necesidad de materia prima. Se ha entrado en la Segunda Revolución Industrial y ninguna potencia puede quedarse atrás. Pero esos gastos de armamento son cada vez más crecientes, y con el tiempo desembocan en quiebras nacionales. Motivo por el que se intenta favorecer el desarme mundial. Así se celebra en el año 1899 la primera Conferencia de La Haya, y en 1907 la segunda. Ha llegado a tal extremo la rivalidad entre paises, que las hace ineficaces. En cuanto a la necesidad de materia prima se recurre a las colonias, que además aportan soldados para las guerras.
Las crisis inmediatas a la Primera Guerra Mundial dan comienzo con la disputa sobre Marruecos, en los años 1905/6. Para evitar el dominio que pueda suponer Francia y España, con sus protectorados en Marruecos, Alemania apoya la independencia marroquí. Se finaliza con la Conferencia Internacional de Algeciras, en el año 1906. Al solo obtener el apoyo Austrohúngaro tanto Francia como España siguen con sus posesiones. De los sucesos en los Balcanes, en el año 1908 he escrito en aportes anteriores. Fueron motivados por la anexión por parte del Imperio Austrohúngaro, de Bosnia Herzegovina. El panserbianismo de Rusia no puede intervenir y la anexión es hecho consumado. En el año 1911, el gobierno alemán vuelve a enviar buques de guerra a Marruecos. Lo hacen en protesta contra Francia, que desea la supremacía en la zona. Esta vez es la Conferencia de Agadir, la que resuelve el problema. Es precisamente en esta última fecha, como tambien he apuntado en aporte anterior, cuando Italia declara la guerra al Imperio Otomano, que demuestra así su debilidad.
Estos acontecimientos vienen auspiciados por la Segunda Revolución Industrial, que arranca aproximadamente a partir de 1830. Para definir este concepto y sus consecuencias os pongo videos de Youtube. Es el proceso histórico que discurre a partir de la transformación agraria y artesanal a raíz de la aparición de la Industrialización. Esto sucede gracias a la aplicación del vapor a la maquinaria. Nace así la maquina de tren, la industria textil, barcos de vapor, minería, algodón y un largo etcétera. La consecuencia es una fuerte burguesía frente a un proletariado que vive en condiciones inhumanas, por hacinarse en barrios obreros. La falta de control por parte del Estado, y la precariedad d los sueldos bajos conlleva escenas lamentables: niños de corta edad trabajando en minas, prostitución, alto alquiler de vivienda, embriaguez y todo el lado oscuro del género humano. Esto sería en la Primera Revolución Industrial, que tiene su origen a finales del siglo XVlll. La diferencia con la Segunda Revolución Industrial, de condiciones algo más suaves con la perfección de la máquina estriba en el destierro del vapor por otras fuentes energéticas y la aparición de la Industria Química, de la que Alemania es la cabeza. Aquí hago destacar su importancia para la guerra por los lesivos gases lacrimógenos y mostaza usados contra las trincheras enemigas.

Quien haya leido a Charles Dickens entenderá lo que significa su ”novela social”. Es el reflejo de sus vivencias trasladado a su obra literaria. Nace en el Condado de Kent (Reino Unido) en 1812. Tiene la desgracia de nacer en una familia pobre y analfabeta. Le toca vivir en esa etapa de la Primera Revolución Industrial. En la que los niños trabajan, como es su caso. Su novela “Oliver Twist” es una autobiografía con ligeros maquillajes. En la ficción Oliver es huérfano. En la realidad, Dickens tiene padres. Su madre es de naturaleza abúlica posiblemente doblegada por las fatigas monetarias. El padre llega a ser encarcelado por las deudas, en 1824 Charles que es un niño ha de trabajar en la mina para ayudar a la familia. A los pocos años de esta situación, la familia recibe una herencia. No es muy cuantiosa, pero es lo suficiente para pagar deudas, sacar al padre de la carcel y elevar el nivel de vida familiar. Charles queda muy decepcionado, al negarse el padre a sacarlo de la mina y buscar otro empleo. La madre afectada por su carácter, no protesta. De ahí, que Oliver Twist sea huérfano en la novela. Más adelante el joven Dickens tiene la suerte de encontrar un empleo, en un despacho de abogados. Allí aprende a leer, escribir y tener aires mas mundanos. Sigue la racha de suerte y el maduro Dickens comienza a escribir para el diario “Mirror” crónicas parlamentarias. Gusta su estilo al público y es llamado por otro diario para que colabore en su redacción. Al principio lo hace con seudónimo. Cuando esta consagrado con su nombre. Ha nacido la super estrella. Empleo el sufijo “super” por que las ventas de sus libros superan en mucho lo habitual. El resultado es que Charles Dickens es ahora hombre rico e influyente.
No es solo en “Oliver Twist” donde se refleja el carácter social, de esa epoca de la Inglaterra victoriana que le tocó vivir. En “Cuento de Navidad” el protagonista Ebenezer Scrooge, que es un viejo cascarrabias, al hablar de navidades presentes, pasadas y futuras, lo hace de esa Inglaterra sumida en la Revolución Industrial en la que vive. Sucede igual con “David Corpeffield” y en realidad prácticamente el resto de su obra, como por ejemplo “Los papeles del Club Picwic”.