HAY QUE PREDICAR EL EVANGELIO.


El Evangelio es inconfundible, es perfecto, y dejó abolido todo aquello que era imperfecto en las leyes del viejo testamento, es decir, abolió del viejo testamento todo lo que eran preceptos de hombres..., igual que dejó abolidas las filosofías religiosas que no guardaban fielmente las enseñanzas y mandamientos del Evangelio