Pues si los crean a retazos, Dios nos libre del engendro que saldrá de ahí.
De la misma manera que se manipula a los vegetales para obtener productos del agrado del consumidor, también se pretende hacer lo mismo con los "nuevos humanos" que salgan de laboratorio.

A esos, para tenerlos a su servicio ni tan siquiera necesitarán adoctrinarlos...