Yo pensé que "para Dios no hay nada imposible",
Pero de repente, parece que hay cosas imposibles, aún para Dios.
Ah, y claro, para Dios no es imposible insuflarle un poquito más de gasolina al Sol, antes que éste se extinga,
así los resucitados no pasarán al frio por el resto de la eternidad.