
Iniciado por
Abysso
Australia:
Más de mil casos registrados de pedofilia que tenían archivados los testigos de Jehová. Ninguno fue reportado a las autoridades.
Tuvo el gobierno que tomar medidas y así salieron a la luz. Hoy cualquier kimo puede irlo a ver... pero claro, no lo hará porque sino deberá admitir ante su consciencia que participa de una organización criminal, y que el esfuerzo que pone ahí día a día deriva en forma de dinero : millones de dólares para pagar juicios por abusos a menores. 35millones.
SENSACIONAL!!! QUERIDO SEN SA CIO NALISIMO
Son tantas las mentiras que se han dicho en Internet
sobre los testigos de Jehová
y la Royal Commission de Australia sobre abuso infantil,
que parece una tarea titánica tratar de aclarar la verdad.
Al fin y al cabo, como decía el nazi Göbbels,
una mentira repetida mil veces
se convierte en una verdad,
y si algo hacen nuestros enemigos en Internet
es repetir la misma mentira miles de veces,
hasta que parezca que es una verdad,
sin importar lo terriblemente cruel, injusta y repugnante
que pueda ser su mentira.
Mucha gente cree que lo de la Royal Commission
fue un juicio contra los testigos de Jehová,
y que incluso un miembro de nuestro cuerpo gobernante
se tuvo que sentar en el banquillo de los acusados.
Muchos ni siquiera saben qué es una Comisión Real,
no saben que tiene un carácter más legislativo que judicial,
que simplemente analiza un problema social
a fin de buscar algún tipo de legislación que pueda ayudar.
Y muchos no saben que la Australian Royal Commission (ARC)
sobre respuestas institucionales al abuso sexual infantil
trató el problema en relación con diversas religiones
e instituciones australianas, no solo con los testigos de Jehová.
Los testigos de Jehová están encantados de cooperar con las autoridades,
y lo que hizo la Australian Royal Commission
-investigar diversas religiones e instituciones
a fin de sugerir modos de mejorar
sus políticas sobre el abuso de menores- es muy encomiable
Sin embargo, por nobles que fuesen sus intenciones,
parece que los miembros de la Comisión
tenían una actitud sesgada y hasta hostil
hacia los testigos de Jehová. No es extraño
que algunas personas hayan llegado a la errónea conclusión
de que aquello era un juicio en vez de una audiencia pública.
Suponemos que esto puede deberse
a la información/propaganda que recibieran
de nuestros detractores. Una pena, porque posiblemente
esa actitud enconada les impidió ser más constructivos
y dar recomendaciones más realistas y prácticas.
Y sin duda que esa actitud causó un alboroto injusto
en los medios de comunicación, con afirmaciones
muy crueles sobre nosotros que terminaron siendo falsas o distorsionadas.
LO QUE YO ENSEÑO NO ES MIO
PERTENECE AL QUE ME ENVIO” (Juan 7:16.)