
Iniciado por
Roberto0
ENTÉRATE.
CÓMO VIVIERON LOS PRIMEROS CRISTIANOS
Los primeros cristianos vivieron como Jesucristo les había mandado, vendiendo sus propiedades y repartiendo a cada uno según su necesidad. Todo lo tenían en común y a nada llamaban propio. Un ejemplo de esta forma de vida tan piadosa lo encontramos en el libro de los Hechos de los apóstoles, que así nos dice:
"Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones. Y sobrevino temor a toda persona; y muchas maravillas y señales eran hechas por los apóstoles. Todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas; y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno. Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón, alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos". (Hechos 2:42-47).
"Y la multitud de los que habían creído era de un corazón y un alma; y ninguno decía ser suyo propio nada de lo que poseía, sino que tenían todas las cosas en común. Y con gran poder los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús, y abundante gracia era sobre todos ellos. Así que no había entre ellos ningún necesitado; porque todos los que poseían heredades o casas, las vendían, y traían el precio de lo vendido, y lo ponían a los pies de los apóstoles; y se repartía a cada uno según su necesidad. Entonces José, a quien los apóstoles pusieron por sobrenombre Bernabé (que traducido es, Hijo de consolación), levita, natural de Chipre, como tenía una heredad, la vendió y trajo el precio y lo puso a los pies de los apóstoles". (Hechos 4:32-37)
Así es como habían mandado vivir Jesucristo y los apóstoles (la comunidad de bienes de los primeros cristianos). Pero los hombres rebeldes y codiciosos, como siempre, inventaron religiones diferentes y gobiernos del mundo para justificar la codicia de los señores de la guerra que se hacían dueños de tierras, vidas y haciendas.