La religión del Imperio romano estaba bajo el dominio de los emperadores de Roma, y fue esa religión dominada por los emperadores la que impuso de nuevo los mandamientos que Jesús había anulado del Antiguo Testamento y que solo eran mandamientos de hombres que habían sido añadidos a la ley por los escribas que cambiaron la ley de Dios en mentira, como dice el profeta Jeremías:Los emperadores de Roma y su religión (siglo IV), impusieron las leyes del viejo testamento para dejar anulados y mal comprendidos los mandamientos del Evangelio: NO QUERÍAN LOS MISERICORDIOSOS MANDAMIENTOS DEL EVANGELIO...
'¿Cómo decís: Nosotros somos sabios, y la ley del Señor está con nosotros? Ciertamente la ha cambiado en mentira la pluma mentirosa de los escribas'
Jeremías 8:8.