El endoracismo es lo que más afecta. Estamos rodeados de gente que jura y perjura que "los latinoamericanos" somos flojos, que nunca seremos como los japoneses que hacen un plan de trabajo durante 18 generaciones, sacrificados a la pobreza y trabajo duro hasta que el tataratataratataratataratataratataranieto del primero logra surgir por todo lo alto y blablabla... en todo ese autoseñalamiento, ese masoquismo, se pierden oportunidades y tiempo de emprender y sobre todo, se diluye el necesario factor de creer en sí mismo. Luego, en cada país se culpa al gobierno de turno, que no brinda oportunidades y por eso no se puede surgir... mientras por otro lado se sigue admirando a italianos, españoles y portugueses que llegaron con una mano adelante y una atrás, huyendo de una guerra y con muchísimas menos oportunidades que la mayoría de nosotros, pero que lograron hacerlo en nuestros países.