
Iniciado por
María_Laura3
Piroju, eso de que fue una prueba es un invento, no es lo que enseña el Evangelio, pues Jesús enseñó a sus discípulos que es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja que entrar un rico en el reino de los cielos. Así que el mandamiento de vender todo y darselo a los pobres es para todos los ricos.
Lee lo que dijo el apóstol Pedro:
Mateo 19:25-30
Entonces respondiendo Pedro, le dijo: He aquí, nosotros lo hemos dejado todo, y te hemos seguido; ¿qué, pues, tendremos? Y Jesús les dijo: De cierto os digo que en la regeneración, cuando el Hijo del Hombre se siente en el trono de su gloria, vosotros que me habéis seguido también os sentaréis sobre doce tronos, para juzgar a las doce tribus de Israel. Y cualquiera que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por mi nombre, recibirá cien veces más, y heredará la vida eterna. Pero muchos primeros serán postreros, y postreros, primeros.
José de Arimatea tenía miedo de los judíos. Lee:
Juan 19:38
Después de todo esto, José de Arimatea, que era discípulo de Jesús, pero secretamente por miedo de los judíos,
Entonces, él no andaba con Jesús como los apóstoles y las mujeres que le seguían. Por otra parte, en ninguna parte está escrito que aquellos hombres no hubieran repartido todos sus bienes entre los pobres en algún momento de su vida. Tanto José de Arimatea como cualquier otro hombre que no hubiera repartido sus riquezas entre los pobres, algún tendría que hacerlo si quería agradar a Jesús y entrar al reino de Dios, porque Jesús dijo que es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja que entrar un rico en el reino de los cielos. Por eso, todos los que creían en el Evangelio, vendían sus propiedades para que todo fuera repartido según la necesidad de cada uno:
Hechos 2:42
Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones.
2:43 Y sobrevino temor a toda persona; y muchas maravillas y señales eran hechas por los apóstoles.
2:44 Todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas;
2:45 y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno.
2:46 Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón,
2:47 alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos.
Hechos 4:32
Y la multitud de los que habían creído era de un corazón y un alma; y ninguno decía ser suyo propio nada de lo que poseía, sino que tenían todas las cosas en común.
4:33 Y con gran poder los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús, y abundante gracia era sobre todos ellos.
4:34 Así que no había entre ellos ningún necesitado; porque todos los que poseían heredades o casas, las vendían, y traían el precio de lo vendido,
4:35 y lo ponían a los pies de los apóstoles; y se repartía a cada uno según su necesidad.
4:36 Entonces José, a quien los apóstoles pusieron por sobrenombre Bernabé (que traducido es, Hijo de consolación), levita, natural de Chipre,
4:37 como tenía una heredad, la vendió y trajo el precio y lo puso a los pies de los apóstoles.
Piroju, se ve que no has entendido el ejemplo de Zaqueo, pues no es un parte lo que dio a los pobres ni dice el Evangelio que siguiera siendo rico. Mira lo que dice el Evangelio:
Lucas 19:8
Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado.
Si él dio la mitad de sus riquezas a los pobres más el cuádruplo de lo que hubiera defraudado, ¿tú qué sabes lo que le quedó al final? Deberías comprender que la otra mitad de sus bienes era para entregar el cuádrulo de lo que hubiera defraudado. De otro modo, ¿cómo iba a entregar el cuádruplo de lo que hubiera defraudado? Ya ves qué confundido estás, que piensas que Zaqueo siguió siendo rico después de entregar todo lo que él dijo a Jesús que entregaba a los pobres y a los que hubiera defraudado. En ninguna parte del Evangelio está escrito que él siguiera siendo rico.