
Iniciado por
María_Laura3
Piroju, lo que estoy diciendo es que los testigos de Jehová, igual que otras religiones que se llaman cristianas, predican que Dios había ordenado a los hombres matar en muchas ocasiones.
Jesús anuló los mandatos del Antiguo Testamento que ordenaban a los hombres matar a las personas en muchas ocasiones, y los anuló porque no eran mandatos de Dios sino de hombres, pues Jesús no vino a abolir la ley de Dios, pero los testigos de Jehová decís que Dios había ordenado esos mandatos.
Entonces, vuestra doctrina no se ajusta al Evangelio, pues Jesús no dijo que esos mandatos hubieran sido dados a Moisés, Jesús los anuló, y así nos dio a entender que no eran mandatos de Dios porque Jesús no vino a anular la ley de Dios.
¿Una pistola? Los cristianos no deben usar pistolas. Y te recordaré el ejemplo que nos dio Jesús cuando iban a detenerle para ser crucificado:
Pero es Dios el que tiene la autoridad para quitar la vida a los malvados. Los hombres no deben matar porque tienen el mandamiento de Dios: no matarás.
Decir que Jesús es Dios no es mentir, pues el Evangelio enseña que Jesús es Dios mismo que se hizo carne:
Juan 1:1
Al principio era el Verbo, y el Verbo estaba en Dios, y el Verbo era Dios.
1:2 El estaba al principio en Dios.
1:3 Todas las cosas fueron hechas por EL, y sin El no se hizo nada de cuanto ha sido hecho.
Juan 1:14
Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros, y hemos visto su gloria, gloria como de Unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.
Jesús nos dio ejemplo para que nos comportemos como Él lo hizo. No veo por qué no podéis entender que Jesús se dirija al Padre, pues Él se había hecho hombre para comportarse como el Hijo de Dios y así darnos ejemplo de cómo deben comportarse ante Dios los hombres y mujeres de buena voluntad.
No debes ignorar esto que dice la escritura:
Hebreos 1:5
Porque ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás:
Mi Hijo eres tú,
Yo te he engendrado hoy,
y otra vez:Yo seré a él Padre,
Y él me será a mí hijo?
1:6 Y otra vez, cuando introduce al Primogénito en el mundo, dice:
Adórenle todos los ángeles de Dios.
1:7 Ciertamente de los ángeles dice:
El que hace a sus ángeles espíritus,
Y a sus ministros llama de fuego.
1:8 Mas del Hijo dice: Tu trono, oh Dios, por el siglo del siglo;
Cetro de equidad es el cetro de tu reino.
1:9 Has amado la justicia, y aborrecido la maldad,
Por lo cual te ungió Dios, el Dios tuyo,
Con óleo de alegría más que a tus compañeros.
1:10 Y:
Tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra,
Y los cielos son obra de tus manos.