Jesucristo dio su vida para enseñarnos los verdaderos mandamientos de Dios y para librarnos de los mandamientos de los hombres escritos en el viejo testamento:

"Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin". (Mateo 24,11-14).

"Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado". (Marcos 6:15-16).